Vizzotti ratificó que el plan es administrar dos dosis de la Sputnik V, con un intervalo mínimo de 21 días
La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, ratificó que el plan es aplicar las dos dosis de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus con un intervalo mínimo de 21 días, tal como es la indicación, en tanto que Aerolíneas Argentinas anunció que llegarían el sábado al país las 300.000 dosis del segundo componente para completar el esquema de quienes que ya se aplicaron la primera.
“El Gobierno argentino adquirió al Fondo de Inversión Directa de Rusia 15 millones de esquemas de vacuna Sputnik V, 30 millones de dosis, que llegarán en función del contrato firmado, entre los meses de diciembre y marzo de 2021”, señaló la funcionaria de Salud en un hilo de Twitter.
Vizzotti recordó que la vacuna desarrollada por el Centro de Investigación Gamaleya de Rusia “es la única cuyo esquema de vacunación consta de dos componentes, en primer lugar, el componente Ad26, y luego de un intervalo mínimo de 21 días, el segundo componente Ad5. Argentina planea administrarlas según esta indicación”.
“En los próximos días, según lo planificado, llegarán 300 mil dosis del segundo componente, para completar los esquemas de vacunación iniciados. Luego, continuará el cronograma de entrega hasta completar el 100% de las dosis adquiridas, de ambos componentes, tal como se informó”, aseveró.
En relación al debate en torno a la estrategia sanitaria, Vizzotti sostuvo que “desde el inicio, analizamos acciones sanitarias para dar respuesta a la pandemia, entablamos negociaciones con todos los productores para contar con vacunas seguras y eficaces en cantidad suficiente y en forma oportuna”.
“Analizamos en consenso con expertos, expertas y las 24 jurisdicciones, las posibles estrategias de vacunación para lograr el objetivo que ansiamos: avanzar hacia el principio del fin de la pandemia y salvar la mayor cantidad de vidas posibles”, concluyó.
Por su parte, Aerolíneas Argentinas informó que el jueves a las 21 partirá desde Ezeiza un vuelo directo a Moscú para buscar “otras 300 mil dosis de la vacuna Sputnik V”, cuyo retorno está previsto para el sábado al mediodía.
La médica infectóloga Florencia Cahn, presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE), señaló a Télam que “en el mundo, países como el Reino Unido están utilizando como estrategia diferir la segunda dosis de las vacunas para llegar a más personas con una primera dosis”.
Cahn, quien es parte del Comité de Expertos que asesora al Gobierno, indicó que “en Argentina por el momento ésta no es la estrategia que se haya aprobado ni consensuado en la Comisión Nacional de Inmunización (CoNaIn)”.
Tal como explicó Vizzotti, Cahn recordó que “en el caso de la vacuna Sputnik V, como tiene dos componentes diferentes, la única estrategia que se podría pensar hoy sería diferir la segunda dosis, pero no se podría no darla”.
La especialista recordó que “con los intervalos entre dosis de vacunas siempre es importante respetar el mínimo, que en en el caso de la Sputnik V es de 21 días, porque si se da la segunda dosis antes puede haber interferencia con la respuesta inmune y no ser tan eficaz como uno quisiera”.
“En referencia a los máximos, en el común de las vacunas como por ejemplo las que conforman el Calendario Nacional no hay un límite, uno puede darlas mucho tiempo después y ser igual efectiva”, añadió.
Este lunes Brasil se sumó al debate que inició Reino Unido sobre las estrategias para realizar las vacunaciones masivas ante la falta de dosis para completar los esquemas de vacunación en los períodos de tiempo que se realizaron en los ensayos clínicos.
“Con dos dosis de la Oxford tendremos 90% de eficacia, pero con una vamos a tener 71%. Quizás ahora el foco no sea la inmunidad completa y sí la reducción del contagio, con lo cual la pandemia va a disminuir mucho”, dijo el ministro de Salud brasileño, general Eduardo Pazuello.
La semana pasada, el Reino Unido, uno de los países más afectados por la pandemia en Europa, cambió sus planes de vacunación para que la segunda dosis (tanto de Pfizer/BioNTech como de Oxford/Astrazeneca) sea administrada hasta 12 semanas después de la primera, en lugar de los 28 y 21 días prescritos.
Bélgica y Alemania también pidieron a sus expertos evaluar una aplicación de la segunda dosis hasta un máximo de 42 días, el límite fijado por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), mientras que Dinamarca anunció que dejaría pasar dicho plazo entre ambas inyecciones.
“Estas medidas, como diferir la segunda dosis, aplicar una sola dosis o combinar vacunas, son consecuencia de que las empresas no dan abasto para cumplir con las dosis que habían prometido; es muy difícil producir vacunas y en las cantidades que se necesitan”, sostuvo Emilio Malchiodi, Profesor Titular de la Cátedra de Inmunología de la Facultad de Farmacia y Bioquímica, UBA y Director del Instituto de Estudios de la Inmunidad Humoral (UBA-Conicet).
El especialista indicó a Télam que “también se está demostrando que es muy complicado vacunar desde el punto de vista operativo; hay que observar que todos los países del mundo están teniendo problemas con esto, incluso Estados Unidos que todavía no logró llegar al número de vacunados que había anunciado”.
Este martes, la jefa de científicos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Soumya Swaminathan, reiteró en una rueda de prensa que “ningún nivel” de inmunidad de rebaño para el coronavirus será alcanzado en este año, incluso con las vacunas, y que el uso de barbijos, el distanciamiento y la higiene “seguirán siendo el día a día de la humanidad” al menos hasta diciembre próximo.