Vandenbroele negocia declarar como arrepentido y complicaría más a Boudou
Los abogados del testaferro de Boudou piden que sea incluido en el programa de protección de testigos y una reducción de penas.
Sorpresivamente, el ex testaferro de Amado Boudou, Alejandro Vandenbroele comenzó a negociar en reserva con la Justicia y el Gobierno la posibilidad de acogerse a la ley del arrepentido en la causa Ciccone.
Los abogados del operador de la compra de la que era la única imprenta privada -antes de su polémica estatización por parte de Cristina Kirchner- con capacidad para imprimir billetes inició hace dos semanas consultas informales con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para saber si su cliente podía ser incluido en el programa de protección de testigos e imputados de su cartera porque teme por su vida.
Bullrich comunicó al juez federal Ariel Lijo de esa posibilidad y éste explicó que la defensa debe negociar con el fiscal Jorge Di Lello el intercambio de información que permita avanzar en la investigación a cambio de una reducción de penas. “La evaluación para determinar si los datos y documentos que ofrece Vanderbroele sirven, corresponde a la Justicia”, subrayaron las fuentes.
En las conversaciones, Vandenbroele quería estricas medidas de seguridad, una casa segura y “facilidades económicas” mientras esté en el programa de protección. Bullrich le garantizó las primeras dos condiciones y la tercera debería ser “la misma asignación dineraria” que reciben otros arrepentidos. Las tratativas continuarán la semana próxima para intentar explicar el alcance del programa de protección de testigos e imputados en el que, por ejemplo, ya está incluído Leonardo Fariña, el arrepentido de la causa de la ruta del dinero K.
El ex testaferro de Boudou estaría asustado porque recibe amenazas y prácticamente todos los días lo llaman por teléfono distintas personas para “garantizar que no se doble”, explicaron las fuentes. Sospechan que “un empresarios” estaría financiando a testigos e imputados para que no se quiebren.