Un enviado de Obama llegó con un mensaje de apoyo al Gobierno
El clima de optimismo generalizado y las coincidencias que hubo entre los comensales de la oposición y del oficialismo llamó la atención a los anfitriones. En este contexto, el secretario de Estado norteamericano para Brasil y el Cono Sur, William Ostick, se animó a expresar ayer que Washington “apoyará al actual gobierno argentino en todos los desafíos que tiene ahora en el plano internacional”, porque cree que la Argentina es un “socio estratégico fuerte” para los Estados Unidos.
En tren de respaldos, el enviado de Barack Obama a Buenos Aires añadió que Washington seguirá el mismo camino que mostró Francia en su apoyo a la Argentina para negociar la deuda que tiene en el Club de París. Se refería al apoyo explícito que recibió Cristina Kirchner del presidente francés, François Hollande.
Todo esto ocurrió ayer al mediodía en la coqueta residencia de la diplomacia norteamericana, en Palermo, donde Ostick y el encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos, Kevin Sullivan, almorzaron con representantes de la oposición y del oficialismo y ex embajadores argentinos. Allí estaban, entre otros, la macrista Gabriela Michetti , el radical Julio Cobos, el denarvaista Gustavo Ferrari, el sciolista Ricardo Lagorio, el duhaldista Carlos Brown, el kirchnerista Jorge Landau y el ex embajador José Octavio Bordón.
Ostick llegó ayer a Buenos Aires para realizar una rauda visita con autoridades argentinas, legisladores y empresarios. Por la mañana estuvo con el secretario de Comercio, Augusto Costa, y con la subsecretaria de Relaciones Internacionales de la Cancillería, María Squeff.
Según relataron a la nacion cuatro fuentes presentes en el almuerzo, Ostick escuchó a una oposición bastante medida y cauta. Ajena a las confrontaciones y cuidada en su discurso. Ferrari hizo alusiones a la problemática del narcotráfico y la conflictividad social en el país.
El anfitrión escuchó los discursos y se entusiasmó con el clima de coincidencias entre oficialistas y opositores. Incluso Landau se mostró receptivo a las críticas y sorprendió al señalar que el Gobierno deberá “ahora” enfrentar los desafíos de la inflación, la inseguridad y la negociación por la deuda, para “no dejarle una bomba al gobierno que viene en 2015”.
A su vez, Ostick destacó la necesidad de que ambos países confluyan en una “agenda positiva”. Fue allí cuando desnudó el mensaje que traía bajo el brazo: Estados Unidos apoyará a la Argentina “en todos los desafíos del plano internacional que encaró porque este Gobierno empieza a reconocer ahora esos problemas”, según pudo saber la nacion.
Luego, Ostick destacó que las diferencias que pudieron existir en los últimos tiempos “son hechos comunes en la relación de amistades históricas”. Evitó entrar en detalles sobre la polémica suscitada por el canciller Héctor Timerman cuando en 2011 impidió el ingreso de un avión norteamericano que llegaba a dar cursos de instrucción a la policía. Prefirió resaltar el pleno apoyo de Washington de cara al futuro.
UNA VISITA DESDE ESPAÑA
Por primera vez desde que estalló el episodio YPF-Repsol un emisario de España llegó a Buenos Aires. El director de Iberoamérica Pablo Gómez Olea se reunió ayer con el vicecanciller Eduardo Zuain y con autoridades de Comercio Internacional de la Cancillería. “Fue una reunión muy amistosa”, dijo ayer un diplomático argentino.
Fuente: La nación.