Tras la segunda derrota consecutiva, Argentina se entrena en Serbia
Luego de una buena preparación en suelo sudamericano, la continuidad de la previa del Mundial para Argentina ha empezado a tomar un tono algo más preocupante, tras los dos partidos amistosos jugados este fin de semana en Belgrado (Serbia).
Luego de perder con amplitud con el local el día sábado, el conjunto de Lamas volvió a caer este domingo, esta vez frente a Puerto Rico por 97 a 87, en un encuentro que lo tuvo casi siempre abajo por más de 10 puntos.
El primer cuarto ilusionó con una mejoría del equipo, tomando una rápida ventaja de 10-4, con algunos buenos pasajes en el juego interior de parte de Marcos Delía. Sin embargo, la diferencia duró poco y con una ráfaga de 8-0, los boricuas pasaron al frente.
Igualmente Argentina reaccionó y con muy buenos minutos de Walter Herrmann (8 puntos en el parcial) y Luis Scola (10), terminó los primeros diez adelante por 24 a 19, ante un rival que daba bastantes libertades en defensa.
Desde allí el juego cambió 180° grados. “El Alma” arrancó bien el segundo período con Facundo Campazzo repartiendo asistencias y haciendo jugar a sus compañeros, pero una vez que el base se apagó, su equipo perdió ideas y eficacia en ataque.
Sin puntos en un costado y con muchas desconcentraciones en el otro, Argentina no sólo perdió la ventaja, sino que además, empezó a ver como Puerto Rico comenzaba a quebrar el marcador.
Los centroamericanos empezaron a encontrar muchos puntos en contragolpes y tuvieron un excelente ingreso desde el banco de parte del talentoso pivote Jorge Bryan Díaz, indetenible para los pivotes nacionales.
De esa forma, y ayudado por una eficacia en libres muy baja de parte del equipo de Lamas, los dirigidos por “Paco” Olmos dieron vuelta el resultado y se fueron al descanso largo al frente por 49 a 39, luego de ganar el parcial por 30 a 15.
El inicio del segundo tiempo siguió siendo favorable para Puerto Rico, ante un conjunto argentino que sólo encontraba soluciones en la mano de Luis Scola. Buenos momentos de Carlos Arroyo y Renaldo Balkman, más una bomba de Ricky Sánchez, quebraron definitivamente el marcador (67-51).
Argentina tuvo una pequeña reacción en el cierre del tercer cuarto con un par de volcadas de Tayavek Gallizzi, pero aún así, la diferencia seguía siendo considerable (69-57), tanto desde los números, como desde el juego.
Lo más cerca que logró acercarse la Selección fue a seis tantos (71-65) en los primeros pasajes del último período, gracias a un par de triples al hilo de Nicolás Laprovíttola y Facundo Campazzo que pusieron algunos interrogantes a la definición.
Sin embargo, los mismos duraron poco. Puerto Rico volvió a sacar provecho de una muy floja defensa Argentina y con Díaz, Arroyo y Barea como abanderados, terminó definiendo el partido por 97 a 87.
Más allá de que históricamente Argentina siempre ha tenido problemas en la preparación, estos últimos dos juegos no dejan de prender una señal de alarma para los de Lamas, no sólo por el bajo nivel de algunas individualidades, sino más que nada, por no haber mostrado ese juego en conjunto y dureza defensiva que suele caracterizar a este equipo.
JJ Barea fue el goleador del partido con 17 puntos, seguido en el ganador por los 14 que trajo desde el banco Jorge Bryan Díaz y los 11 de Carlos Arroyo. En Argentina lo mejor pasó por los 16 tantos de Luis Scola, los 13 de Walter Herrmann y Andrés Nocioni y los 11 de Facundo Campazzo.
“El Alma” tendrá una última prueba antes del inicio del Mundial, cuando se enfrente el próximo lunes 25 de agosto a España, en Madrid.