Tostadas francesas: la receta para una de las meriendas más fáciles que hay
Aprovechar el pan que sobra del día anterior es un común denominador en las cocinas de todo el mundo, y de hecho muchas son las recetas que vienen de sobras o restos. Tal es el caso de las famosas tostadas francesas.
Lo que en España recibe el nombre de torrejas, en el mundo sajón es conocido como french toast, y en Francia se llaman pain perdu, literalmente “pan perdido”. Los orígenes de la tostada francesa no están del todo claros: una de las primeras versiones se remonta al Imperio Romano.
El nombre de “tostadas francesas” se utilizó por primera vez en la Inglaterra del siglo XVII. La receta, y el nombre, fueron traídos a América por los primeros colonos. Originalmente, la gente hizo tostadas francesas con el fin de hacer uso del pan que de otro modo habría sido tirado.
Para hacer tostadas francesas, primero hay que sumergir rodajas de pan en una mezcla de huevos batidos, leche, canela y vainilla. Luego, freír el pan con huevo en una sartén hasta que se dore. Algunas personas recomiendan cortar el pan la noche anterior y dejar que se seque para evitar que el pan absorba demasiado huevo y se empape.
En los Estados Unidos, los restaurantes suelen servir tostadas francesas con manteca, jarabe de arce y azúcar en polvo, pero las posibilidades son infinitas. La tostada francesa se puede completar con casi cualquier cosa.
Los ingredientes para hacer tostadas francesas son:
– 2 rodajas de pan viejo.
– 1 huevo.
– 200 ml de leche.
– 1-2 cucharadas grades de azúcar.
– 1 cucharada pequeña de canela..
– 1 cucharada pequeña de esencia de vainilla.
El paso a paso:
1- Batir el huevo.
2- Añadir la leche, azúcar, canela y la esencia de vainilla.
3- Remojar el pan en la mezcla, empapando bien.
4- En una sartén, derretir un poco de manteca.
5- A un fuego medio-alto, freír el pan remojado (más o menos 3 minutos por lado).