Se viene la tecnología en el fútbol, pero muy despacio
Aunque hay un amplísimo consenso para incorporar al árbitro de video al fútbol, y la FIFA está muy necesitada de dar imagen de transparencia por tener en la cárcel o bajo investigación a su cúpula anterior, las resistencias para emplear esta herramienta que ya todos los deportes de elite aplican son difíciles de vencer: en una reunión el 1º de abril en Cartagena, Colombia, se trabajará sobre modificaciones a las Reglas incluyendo “un período de experimentación de dos años para identificar ventajas y desventajas” de su implementación. Por empezar, se lo admitirá sólo para revisión de cuatro situaciones, que no incluyen el offside.
Las cuatro jugadas que admitirán revisión son: 1) el gol; 2) el penal; 3) expulsiones, y 4) errores de identificación en sanciones disciplinarias.
En caso de dudas en esas acciones (y sólo en ellas), el árbitro de video le informará al principal, los asistentes revisarán la acción y el juez, también revisando las imágenes o por el informe que le den sus asistentes, mantendrá su decisión inicial o la modificará.
La FIFA pretende un uso “experimental” por dos años, y la AFA, autora de uno de los proyectos (que era más amplio), pretende que le permitan usarlo ya.
Se acaba el “triple castigo”
Había en la FIFA una preocupación por lo que se consideraba un perjuicio desproporcionado para el que cometía falta en el área impidiendo una “posibilidad manifiesta de gol”. Se consideraba exagerado que se cobrara penal y el infractor fuera expulsado y suspendido. El proyecto para modificar esto elimina la tarjeta roja al que comete la falta cuando lo haga intentando disputar el balón con el rival (típico caso, el arquero que va a la pelota, llega tarde y derriba al delantero, por ejemplo). Allí será penal y amarilla. La tarjeta roja directa se mantendrá en los casos de acciones violentas (caso de Orion contra Unión, la expulsión fue por “juego brusco grave” y no por “último recurso”) y cuando el infractor actúe sin opción de disputar la pelota, esto es: vaya directo a derribar al rival.
Fuente: Olé.com.ar