Schwartzman ganó en su debut en el Australian Open
Con los dos tenistas muy erráticos durante prácticamente todo el partido y donde la confianza cambiaba de lado de la red en apenas minutos, fue el argentino quien se mantuvo un poco más acertado cuando el encuentro más lo requería. Hubo 22 quiebres de saque.
El último set se extendió inesperadamente, en una batalla que dejó maravillado a todo el público que se encontraba en Melbourne, entre los que se destacaron varios argentinos que alentaron al Peque en los momentos claves.
El temperamento del porteño prevaleció sobre el del europeo y le valió para quedarse don el partido.
El “Peque” espera por el ganador del duelo entre el noruego Casper Ruud y el francés Quentin Halyss.
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