Robin Williams, un día antes de quitarse la vida
El actor, que se suicidó a los 63 años, fue fotografiado el sábado a la tarde en una galería de arte en San Francisco, junto a su esposa, Susan Schneider.
El artista plástico Mark Jaeger, famoso por sus esculturas de superhéroes, presentaba su nueva colección. Al evento asistieron figuras reconocidas vinculadas al ambiente artístico, pero una sobresalía: Robin Williams.
Nadie imaginó que era la última vez que lo verían. Al día siguiente, el protagonista de Papá por siempre, En busca del destino y Jumanji, entre otros éxitos, se colgó con un cinturón en su dormitorio.
Jaeger aseguró a TMZ que la noticia lo sorprendió completamente, porque el actor parecía de muy buen ánimo. “Estuvo durante una hora. Se reía frecuentemente“, contó.
Cuando le preguntaron si estaba bebiendo respondió que no. Distintas personas del círculo íntimo de Williams contaron que en los meses previos a su muerte había sufrido una recaída de su adicción al alcohol, con la que luchó casi toda la vida.
El artista también confesó que él y el actor habían llegado a discutir la posibilidad de hacer un guión inspirado en sus esculturas. Contaría la historia de un indigente superhéroe que salía por las noches para ayudar a personas carenciadas.
Las imágenes publicadas por la revista de la farándula se tomaron a las 17.45 del sábado. El lunes siguiente por la mañana encontraron el cuerpo de Robin Williams colgado en el dormitorio de su casa. La autopsia confirmó el suicidio.