Quiénes son los cuatro condenados y los cinco absueltos por el doble crimen de Congreso
1) Juan José Navarro Cádiz (27): Condenado a 45 años de prisión como “autor” de un “homicidio agravado por alevosía reiterado en dos ocasiones en concurso real con portación de arma de guerra”. También lo van a investigar por el presunto abuso sexual de su esposa, por si la dejó embarazada cuando tenía menos de 13 años. Está preso en el penal de Marcos Paz.
Autor material de los disparos homicidas. Confesó en el juicio pero dijo que su intención había sido dispararle a un árbol y no a las víctimas, por lo que pidió perdón. Era el dueño y en su casa secuestraron la pistola Bersa Thunder calibre .40 con mira láser usada en el doble crimen. Detectaron residuos de disparos en una mano y tres pendras de vestir suyas. Quedó grabado huyendo a pie de la escena del crimen y descartando balas y casquillos en un tacho de basura. Se fugó y fue detenido a 48 horas del hecho, en la ciudad uruguaya de Paysandú.
Para poder extraditarlo de Uruguay, se acordó que no podía ser condenado a perpetua. Por eso, el fiscal pidió los 45 años de prisión que es la pena máxima en el vecino país.
Las querellas sí pidieron “prisión perpetua” y agregaron a la imputación el agravante del “homicidio por placer”.
Últimas palabras: “Quiero decirles que nunca quise lastimar a nadie, ni mucho menos matar a nadie. Les pido por favor a las familias que me perdonen”.
2) Juan Jesús Fernández (44): Condenado a prisión perpetua como “partícipe necesario” de un “homicidio agravado por alevosía reiterado en dos ocasiones”. Está preso en el penal de Marcos Paz.
Primo de Navarro Cádiz. Dueño del auto Volkswagen Vento desde donde partieron los disparos. Quedó grabado bajando del auto para mirar a las víctimas y luego subirse al vehículo y escapar sin brindar ayuda.
También quedó filmado en el garaje de la calle Bartolomé Mitre 1444, donde dejó el auto minutos después del ataque.
Fue detenido a dos días del hecho, en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay.
El fiscal lo acusó como coautor del mismo delito que a su primo y había pedido para él prisión perpetua, al igual que las dos querellas.
Últimas palabras: “Quiero decir que en primer lugar soy padre de familia, amo a mi mujer, a mis hijos, a mi esposa, soy un hombre trabajador, toda mi vida trabajé. Nunca tuve problemas con nadie, ni antecedentes penales. Siempre fui una persona buena, cariñosa, servicial, amable, siempre ayudando a los más desfavorecidos”.
“Me parece injusto que por sacar mi auto como sacaba todos los días, por salir esa noche, me quieran dar una condena perpetua. En segundo lugar, también me quieren dar una perpetua por no conocer o no saber las intenciones de las personas”.
“Quiero recalcar que yo soy una persona inocente. No tuve nada que ver esa noche con ninguno de los hechos ocurridos. Me siento penoso por el dolor que pasan mi familia y las familias de Olivares y Yadón. Voy a luchar por mi inocencia hasta mi último suspiro”.
3) Miguel Navarro Fernández (57): Condenado a 2 años y 8 meses de prisión en suspenso por “tenencia de arma de guerra sin la debida autorización”.
Padre de Navarro Cádiz y tío de Fernández. Fue detenido en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay junto a su sobrino. Al inicio de la causa se investigó si también había estado dentro del auto al momento del hecho, pero luego se descartó. Llegó libre al juicio e imputado por “tenencia ilegal de armas”, por algunas secuestradas en su casa.
El fiscal había pedido la pena de su condena y la querella, 3 años y medio de prisión.
Últimas palabras: “Esto ha sido una desgracia para cuatro familias, para la de Miguel Yadón, la de Olivares, la de Juan Jesús Fernández y la de Juan Navarro Cadiz. Fue una noche que estaban drogados, y la verdad que es una injusticia los números que le quieren echar. Esto es un delito que tiene que ser una cosa mínima, a lo que se corresponda por ley”.
4) Luis Cano (66): Condenado a 2 años de prisión en suspenso por “tenencia de arma de guerra sin la debida autorización”.
Amigo de Fernández. La noche del hecho estuvo bebiendo con él en las horas previas al hecho pero se fue a su casa cuando apareció Navarro Cádiz. Estuvo unos días detenido pero fue liberado por falta de mérito. Quedó imputado por “tenencia ilegal de armas”, por un revólver secuestrado en su departamento.
El fiscal y las querellas habían pedido la pena a la que fue condenado.
5) María Rosa Cádiz Vargas (48): Fue absuelta.
Madre de Navarro Cádiz. Quedó demorada unas horas en Uruguay porque acompañaba a su hijo en la fuga cuando lo detuvieron en Paysandú. Llegó en libertad al debate. La acusaron de haber retirado el arma homicida que había quedado tirada dentro del auto de Fernández, en el garaje, y trasladarla hasta la casa de su hijo, donde se secuestró.
El fiscal había pedido la pena mínima de 2 años de prisión en suspenso por como partícipe primaria en la “tenencia ilegal de arma de guerra”. Las querellas pidieron 4 años de cárcel.
6) María Argentina Cádiz Vargas (52): Fue absuelta.
Hermana de María Rosa y tía de Navarro Cádiz. Llegó en libertad al juicio. Al igual que a su hermana, la acusaron de haber retirado el arma homicida del auto.
El fiscal había pedido la misma pena de 2 años de prisión en suspenso por como partícipe en la “tenencia ilegal de arma de guerra”. Las querellas pidieron 4 años de cárcel.
7) Juan Jesús Fernández Cano (21): Fue absuelto.
Hijo del condenado Fernández. Llegó en libertad. También lo acusaron de haber retirado el arma homicida del auto de su padre.
El fiscal había solicitado la misma pena de 2 años de prisión en suspenso por como partícipe en la “tenencia ilegal de arma de guerra”. Las querellas pidieron 4 años de cárcel.
Últimas palabras: “No cometí ningún tipo de delito, es lamentable la forma en que murieron estas dos personas. Entiendo el dolor que tienen sus familias pero espero que entiendan el dolor que tiene la mía. Yo soy inocente”.
8) Rocío Michel Montoya (22): Fue absuelta.
Esposa de Navarro Cádiz. Llegó en libertad y fue imputada por “tenencia ilegal de arma de guerra”, por las secuestradas en el allanamiento en su casa.
La fiscalía había pedido su absolución y la querella, 2 años de prisión.
9) Luis Felipe Quevedo (50): Fue absuelto.
Comerciante de antigüedades de la ciudad de Tandil. Llegó al debate en libertad. Lo acusaban de entregarle o venderle a Navarro Cádiz la pistola homicida sin papeles. Fue imputado por “tenencia y suministro ilegal de armas de fuego”.
El fiscal había pedido su absolución y las querellas, 3 años y medio de cárcel.
Últimas palabras: “El daño que han causado en mi es irreparable. Quiero dar las gracias por haberme escuchado y que hayan podido darse cuenta del tipo de persona que soy, un trabajador una persona de bien y no un traficante de armas como quiso hacer creer el juez de instrucción”.