¿Que era una victoria, San Antonio?
Cuarta derrota al hilo para los San Antonio Spurs, quienes esta madrugada perdieron contra Portland por 115 a 95. Los texanos comienzan a complicar su clasificación a post temporada, Manu terminó con una muy pobre actuación: 2 puntos y 2 asistencias. Por su parte, Prigioni esta en su mejor momento, ya que junto a los Rockets cambió su suerte: participación importante y victoria frente a los duros Clippers.
Después de la insultante derrota frente a Utah Jazz saltaron las alarmas desde el interior del equipo. Manu Ginóbili expresó que como estaban jugando no eran “un equipo de playoffs” y Tim Duncan señaló que necesitaban producir “durante los 48 minutos”. Frente a Portland, como dijo el bahiense, los Spurs no parecen tener ahora los merecimientos para llegar a la postemporada, aunque se ubiquen séptimos en el Oeste; y como apuntó el ala pivote es necesario jugar en forma consistente todo el partido y no como ante los Trail Blazers, apenas el segundo cuarto.
¿Cuántas veces en su carrera de 963 partidos de temporada regular Tony Parker anotó dos o menos puntos? En 23 juegos, y para encontrar el último con apenas dos tantos hay que ir 10 años para atrás.
¿Y Manu? De sus 845 apariciones, en 28 sumó 2 o menos puntos, la última fue el 18 de febrero del 2012.
El belga-francés y el bahiense, ante Portland, fueron una sombra borrosa de los jugadores que brillaron en las finales de la temporada 13/14, hace apenas ocho meses.
Portland, que le ganó tres de los cuatro choques de este ciclo y venía de dos contrastes, hirió de muerte a San Antonio en el tercer cuarto y lo remató a 4 minutos del final después de un triple de Damian Lillard (100-88). Para colmo de males, en los dos ataques siguientes, Marco Belinelli perdió la pelota infantilmente.
En otros tiempos, el equipo de Popovich encontraba atajos para resolver sus problemas con el aporte de los suplentes. Manu era el líder de “la segunda unidad”. Se le reconocía que le ponía chispa y contagiaba a todos cuando más se lo necesitaba. El bahiense ahora aparece con cuentagotas. Y encima Popovich le volvió a recortar los minutos (13).
San Antonio no perdía 4 partidos en fila desde diciembre, entre el 15 y el 20, cuando empezaron a observarse no buenas sensaciones. Las presencias intermitentes de Parker y/o Leonard por lesiones eran válidas como atenuantes. Pero desde hace algo más de 20 partidos el equipo está completo, es el mismo que ganó el título de la 13/14. Sin embargo no reacciona y su juego de conjunto no se parece en nada al que admiró la cátedra.
La Gira del Rodeo, que le impide jugar de local por la fiesta de la doma que se hace en San Antonio, empezó en la temporada 02/03. Desde entonces y hasta la actual, los Spurs tenían un saldo del 72% de triunfos. Las peores cosechas fueron en la 06/07 (4-4), aunque luego se coronaron campeones, ante Cleveland; y en la 09/10 (4-4). La actual ya llegó a cinco contrastes contra apenas dos triunfos. Y por delante queda un back-to-back, nada menos: este vienes ante Sacramento (25% de triunfos) y el sábado frente a Phoenix (50% y en la pelea por el octavo del Oeste).
Si la estrategia de Popovich sigue en la línea de hacer descansar a sus principales jugadores para que lleguen en buena forma a los playoff, cuanto antes debería hacer algo más para que mejoren el nivel de juego. Y ganar partidos. Caso contrario, es probable que estén bien descansados el 15 de abril, cuando termina la temporada regular, pero listos para salir de vacaciones y mirar los playoff por televisión.
Cuando Pablo Prigioni fue a la cancha por segunda vez, Houston perdía 79-81 y quedaba 1m43s para el final del tercer cuarto. El cordobés inició el último tramo y, pese a no anotar en ese segmento, el parcial de su equipo fue 20-8, en 8 minutos (99-89).
Prigioni dio una asistencia genial, de puro generoso, en un contraataque, en el que podía haber anotado fácil, pero prefirió el pase de fantasía para que la volcada de Corey Brewer. El público que llenó el Toyota Center se levantó de las plateas para ovacionar al cordobés.
Después de esa acción lujosa, en otro ataque, juntó a toda la defensa rival y en una típica jugada de cortina y desmarque le entregó la pelota servida a Donatas Motiejunas. Otro pase de gran categoría. También colaboró con dos rebotes, dos robos de puro pícaro y luego le llegó el descanso. El DT Kevin McHale prefirió, como hacen muchos, cerrar con los que tienen que justificar el cheque quincenal. Es una filosofía, ya que si llegaba a perder la culpa se podía dividir en partes iguales.
Fue la mejor actuación que se le vio al cordobés en mucho tiempo, que salió de un equipo perdedor como los Knicks para ya encontrar un hueco en la rotación de Houston, aprovechando la ausencia del base titular, Patrick Beverley, quien por culpa de una gripe faltó a los dos último partidos. Eso sí, acá no hay ofensiva “del triángulo” como en New York, se juega a una velocidad mayor y la posibilidad de ejecutar su especialidad, el pick and roll, tiene más lugar en el cuaderno de sistemas de Kevin Mchale.
Houston (39-18, tercero en el Oeste) venía de perder los últimos siete choques ante Clippers y su estrella, James Harden, no había podido convertir triples en los dos últimos. También pasó a ganador, sin grandes brillos, pero apareció en el final con un triple sobre el límite de la posesión, cuando quedaban 2m30s (109-98).
En Los Angeles Clippers, Blake Griffin se perdió el séptimo partido seguido y se espera que se termine de curar su codo derecho en un par de semanas. Ausente una de sus estrellas, el peso del enfrentamiento lo llevaron Chris Paul (22 puntos y 14 asistencias) y DeAndre Jordan (22 y 19 rebotes) pero la efectividad global fue de apenas el 44% y también perdieron 15 pelotas.
Houston, que tiene un sistema que apuesta al triple, acertó 17 sobre 44, apenas perdió 9 pelotas y repartió mejor su producción. Por ejemplo, el ala pivote Terrence Jones, uno de los que habitualmente no sale en las fotos, terminó con 14 tantos, 9 rebotes y 5 tapas; Donatas Motiejunas tuvo 18 y 9 tableros; y, claro, La Barba Harden, además de entregar 10 asistencias, fue el goleador, con 21, aunque con bajo porcentaje de cancha.
Fuente: Olé.
