Primer día del paro: cruces entre el Gobierno y los gremios por el alcance de la medida de fuerza
Las escuelas trabajaron con normalidad en solo siete provincias. Los sindicatos quieren una paritaria nacional.
Fue un inicio de clases complicado en el país. Mientras algunos chicos pudieron volver al colegio para reencontrarse con sus compañeros y maestros, cerca de cinco millones de alumnos tuvieron que quedarse en sus casas a la espera de que termine el paro docente por 48 horas. Las escuelas trabajaron con normalidad en solo siete provincias.
La huelga, encabezada por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), incluyó además del paro, la movilización masiva de docentes de varias organizaciones sindicales hacia el Ministerio de Educación. Los maestros exigen aumentos por encima de los máximos que fijó el Gobierno, como 12% en la Capital y 15% en la provincia de Buenos Aires, la mayor del país.
Roberto Baradel, secretario general de SUTEBA, dijo durante la manifestación que el Gobierno les quiere dar “aumentos por debajo de la inflación”. “Además la mayoría de los salarios iniciales establecidos están por debajo de la línea de pobreza. El Ejecutivo considera la educación como un gasto y no una inversión“, agregó el gremialista.
Según los gremios, el paro tuvo una adhesión del 85%, sobre todo en el sector público. Sin embargo, el Gobierno bonaerense aseguró que más de la mitad de los maestros de las escuelas de gestión estatal estuvieron este lunes frente a sus alumnos en las aulas y remarcaron que el 70% del sistema educativo funcionó con normalidad en todos sus niveles.
De acuerdo al relevamiento oficial realizado escuela por escuela, en los establecimientos estatales el acatamiento al paro convocado por los gremios docentes alcanzó el 47%, mientras que en las de gestión privada llegó al 2,8%.
Finocchiaro destacó el “mensaje esperanzador” que dieron la mayoría de los docentes. “Ellos se dijeron: ‘Queremos enseñar y sigan discutiendo en las provincias mientras nosotros vamos a dar clases’. Además, resaltó el comportamiento de varios papás que “vencieron la resignación” y llevaron igual a sus hijos al colegio: “No se dejaron intimidar por la noticia de que había paro”.
