Nueva revelación forense del caso Lady Di
Un investigador llegó a la conclusión de que Diana habría sobrevivido si llevaba el cinturón de seguridad.
Diana Frances Spencer, fue la primera esposa de Carlos de Gales, el heredero de la Corona británica, con quien tuvo dos hijos, Guillermo y Enrique. Diana fue objeto del escrutinio mundial y de la atención mediática durante y después de su matrimonio, el cual finalizó el 28 de agosto de 1996. Su vida, obra e inesperada muerte en un accidente de tráfico, acaecida el 31 de agosto de 1997, la convirtieron en un auténtico mito de la cultura británica y en un personaje extremadamente popular.
Sheperd investigó y llegó a la conclusión en su libro Unnatural Cause de que “fue un trágico accidente”.
“De hecho, solo se rompió unos pocos huesos y sufrió una herida pequeña en el pecho. Esa herida suponía un pequeño rasguño en una vena de uno de sus pulmones. Era una herida pero estable, especialmente porque era capaz de mantener la comunicación. Su lesión fue tan rara que en toda mi carrera creo que no he visto otra. La de Diana fue una lesión muy pequeña, pero en el lugar erróneo. Anatómicamente, es algo que está escondido, en el centro del pecho. Las venas, que no tienen la misma presión que las arterias, sangran más lentamente; de hecho, tanto que cuesta identificar el problema. Y una vez identificado, es todavía más difícil de reparar. Si hubiera usado el cinturón de seguridad, y si hubiera sido puesta en una ambulancia inmediatamente después del accidente. Seguramente habría aparecido un par de días después en público con un ojo amoratado, con dificultades para respirar de alguna costilla fracturada o con un brazo en cabestrillo”, aseguró en declaraciones a The Mirror.
Shepherd llegó a la conclusión de que la herida que provocó la muerte de la princesa “era muy pequeña y estaba en el lugar equivocado”. Habría sobrevivido si hubiera llevado el cinturón de seguridad puesto. (Revista Pronto)