Newell’s fue utilitario y práctico para ganarle a Huracán y ser puntero
Newell’s Old Boys de Rosario (45 puntos) sacó provecho máximo de una de las pocas situaciones de las que dispuso y venció a Huracán (21), por 1-0, para saltar a la punta del campeonato, al continuar la 22da. fecha del torneo de Primera División.
El equipo “rojinegro”, dirigido por Diego Osella, alcanzó provisoriamente la línea de Boca Juniors (que mañana jugará ante el colista Arsenal), con la conquista de Ignacio Scocco, a los 29 minutos de la segunda etapa.
El encuentro se disputó en el estadio Tomás A. Ducó de Parque de los Patricios. con un discreto arbitraje de Héctor Paletta, quien se erigió en involuntario protagonista de una situación que casi deriva en la automática suspensión del partido.
Es que el juez, hermano de Gabriel (ex jugador de Boca Juniors, hoy en el Milán italiano), decidió interrumpir el juego al promediar la primera parte, cuando desde las tribunas del “Globo” bajaron insultos hacia su persona, ante el reclamo de una inexistente falta en el área a Alejandro Romero Gamarra.
El partido, de nivel discreto, fue parejo. Huracán, con sus limitaciones a cuestas (lleva seis partidos sin ganar, con cuatro empates y dos derrotas), asumió la iniciativa e intentó presionar en la zona central.
Pero Newell’s estuvo muy bien parado, ordenado atrás y fue inteligente para salir con criterio. Allí estuvo la clave para que el combinado “rojinegro” mantuviera siempre el control “psicológico” del partido.
Es que Huracán, que intenta sumar oxígeno en la pelea, pareció “irse del juego” con la maniobra en la que Romero Gamarra entró al área, Sebastián Domínguez lo intentó cubrir; el delantero cayó y todo el estadio reclamó por un inexistente penal.
Esa jugada trasmitió nerviosismo de afuera hacia adentro. Porque algunos de los futbolistas locales, por ejemplo, confundieron empuje con imprudencia y el citado Romero Gamarra le hundió el codo en la cara a Nehuén Paz, salvándose de una tarjeta roja que hubiera merecido.
En la segunda parte, el panorama no varió demasiado. Por la necesidad de ir e ir, Huracán buscó variantes ofensivas con la entrada de Ignacio Pussetto, quien reapareció luego de una lesión prolongada.
Pero chocó siempre con un Newell’s que, agazapado, esperaba tener una chance en la contra. Y así ocurrió, a los 29m., cuando Mauro Formica le devolvió una pared a Scocco y el goleador despachó un remate cruzado y bajo, que le picó justo antes al arquero Marcos Díaz.
Así, con poco de audacia y mucho de utilitarismo, Newell’s se llevó la victoria y se ilusiona con la posibilidad de seguir en la pelea por el título hasta el final.