Moda bajo cero: el look de la selección para no congelarse en Manchester
Gorros, calzas, cuellos térmicos, guantes. Cualquier elemento es bienvenido para cubrirse del frío, tanto que cuesta descubrir a cada futbolista de la selección argentina en el entrenamiento matutino, mientras el cielo se cierra y los cuatro grados de temperatura congelan el aire. No está tan mal, igual: en la madrugada el termómetro se había estacionado en cero, una marca que se espera vuelva durante la semana. Para calentarlos, el profesor Jorge Desio los apura en el comienzo de la mañana. “¡Robala, sparring, dale!”, “¡Buena, buena, buena!”, “¡Bien, Javier, así!”, “¡Precisión en el pase, Leo!”. Javier es Mascherano y Leo es en realidad Leandro Paredes y no Messi, al que se lo espera a la tarde.
La selección espera por Messi para completar la lista de 27 convocados: el capitán participará del entrenamiento de la tarde, con el resto de los delanteros
En ese contexto, con los chicos de la sub 20 entrando y saliendo de cada grupo cada 30 segundos para que el movimiento no perdiera intensidad, el grupo que trabajó fue el bloque defensivo, mientras los tres arqueros (Sergio Romero, Nahuel Guzmán y Willy Caballero) se movían en otra cancha con Martín Tocalli, su entrenador. En esos ejercicios defensivos que comandó Jorge Sampaoli estuvieron 12 jugadores: Fabricio Bustos, Gabriel Mercado, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori, Marcos Rojo, Federico Fazio, Nicolás Tagliafico, Marcos Acuña, Lucas Biglia, Éver Banega, Paredes y Mascherano.
El delantero, que se recupera de una lesión que muy probablemente le impida jugar los dos partidos de la gira, fue uno de los que no tuvo que afrontar el frío de la mañana. Como Manuel Lanzini, Ángel Correa, Gonzalo Higuaín, Diego Perotti, Maximiliano Meza, Giovani Lo Celso y Ángel Di María. Mientras tanto, se esperaba el arribo de los cuatro que completarán la lista de 27. Tres llegaban desde la Argentina (Lautaro Martínez, Cristian Pavón y Pablo Pérez) y uno desde Barcelona, en un vuelo privado…
Para ver la cara de Lionel Messi mezclada con sus compañeros habrá que esperar hasta la tarde, cuando la temperatura trepe hasta los 7 grados. Una caricia para los locales, aunque los visitantes lo sientan de otra manera. Ya lo dijo un guardia del predio, encargado de guiar a los periodistas por los senderos que conducen a las 17 canchas: “¿Tienen frío? ¡Es un día hermoso!”
Fuente: La Nación