Marchas antixenofogas en Alemania
Miles de personas salieron ayer a las calles de varias ciudades alemanas en defensa de un país abierto y tolerante y en rechazo al movimiento islamófobo Pegida, que reunió una cifra record de 18.000 seguidores en su novena marcha en la ciudad de Dresde. En la propia Dresde, 5000 personas se manifestaron en contra de la agrupación racista; algunas empresas como Volkswagen tomaron postura dejando sus instalaciones a oscuras. En Colonia, manifestantes contra Pegida llevaron carteles con lemas como “Juntos por una Colonia tolerante y multicolor”, y edificios públicos apagaron las luces en señal de protesta, incluida la célebre catedral de la ciudad. También la ópera Semper de Dresde quedó a oscuras de forma simbólica.
Más de 5000 personas marcharon en Berlín rumbo a la emblemática Puerta de Brandeburgo con banderas de sindicatos y partidos políticos de centroizquierda y de grupos de izquierda. Otras 10.000 personas salieron a manifestarse en la ciudad de Munster, 8000 se reunieron en Stuttgart y la concentración en Hamburgo reunió a 4000 manifestantes. En la convocatoria de Stuttgart participó el alcalde de la ciudad, Fritz Kuhn, quien dijo estar orgulloso de la cantidad de gente reunida.
Al igual que cada lunes desde hace dos meses, los denominados Europeos Patrióticos contra la Islamización de Occidente –Pegida, por sus siglas en alemán– volvieron a manifestarse por la noche en la ciudad oriental de Dresde para reclamar políticas más duras de asilo, entre otras reivindicaciones. La policía investiga un incidente que ocurrió el 22 de diciembre, justo después de una movilización del grupo xenófobo. El diario de izquierda Taz informó que, enseguida después de la marcha, un grupo de 50 seguidores de Pegida armados y con máscaras en sus rostros atacó a 30 inmigrantes. “El ataque fue aplaudido por los transeúntes”, publicó el periódico.