Luis Novaresio contó que se complicó su boda con Braulio Bauab
Luis Novaresio sigue ultimando los detalles de su casamiento con el empresario Braulio Bauab pero, contrariamente a lo que había declarado hace unos días, no podrá casarlos una rabina, de acuerdo con la tradición judía que observa uno de los novios, ya que no puede unir religiosamente “matrimonios mixtos”.
“Quiero mandar un abrazo a toda la ‘cole’ porque se armó un bolonqui fenomenal con el tema de la rabina. Ustedes saben que Braulio no es practicante, no es observante pero es muy respetuoso y admira mucho a la tradición judía, y se armó lío cuando dije que nos iba a casar una rabina“, comentó esta mañana el conductor de Novaresio 910. En este sentido, insistió con que la boda será “una fiesta judía” porque, “¿qué fiesta hay más divertida en el mundo que la fiesta judía? Los casamientos judíos son muy divertidos”.
“Se me armó lío porque conocí a una rabina, Silvina Chemen; no sabía que existían las rabinas en la Argentina, y me pareció fascinante. Cuando le dije a Catalina Dlugui que la íbamos a elegir a ella, se le armó un bolonqui porque no puede casar matrimonios mixtos, entre un judío y un ‘goy’, que soy yo. Una pena. Y Chemen dio una nota desmintiéndome, me desmienten hasta los rabinos“, relató Novaresio entre risas.
“Me llamó muchísima gente, me llamó otra rabina que no voy a dar el nombre, que se ofreció a casarnos, y un amigo de Mendoza me dijo que podía casarnos Roberto Moldasvky, me entusiasmó mucho“, comentó Novaresio, en relación al exitoso comediante autor del libro “Goy Friendly”, y le pidió a su columnista de espectáculos, Maximiliano Legnani, que le pase el contacto.
“Es una ceremonia recontra rigurosa y emotiva, pero es un casamiento. Si podemos conseguir que nos case Moldavsky que ya hizo casamientos, que son muy emotivos y muy graciosos, yo se lo agradecería“, finalizó. (La Nación)