Las operadoras móviles tendrán que requerir reconocimiento facial para cambiar tarjetas SIM
El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) obligará a las operadoras de telefonía móvil a modificar sus sistemas de seguridad y adoptar el reconocimiento biométrico a la hora de requerir una nueva tarjeta SIM por hurto o sustitución, con el objetivo de evitar los casos de robo de identidad y hackeo.
“Lo que nosotros vamos a hacer es obligar a las empresas a que cambien el mecanismo de seguridad que tienen”, afirmó el vicepresidente del Enacom, Gustavo López, en declaraciones radiales y adelantó que entre esta semana y la otra el ente publicará la resolución correspondiente.
El “SIM Swap”, método presuntamente utilizado en los recientes hackeos al ministro porteño de Seguridad y Justicia, Marcelo D´Alessandro y al diputado nacional de Juntos por el Cambio (JxC), Diego Santilli, consiste de un método de robo de datos e identidad que se realiza aprovechando la falta de seguridad de los operadores móviles a la hora de solicitar una nueva SIM, tarjeta desmontable que almacena el número de teléfono del usuario de telefonía.
Para realizar este tipo de hackeo, el atacante, con una tarjeta SIM en blanco -generalmente conseguida de forma ilegal-, se comunica con la operadora para denunciar un supuesto robo o pérdida de la tarjeta.
El problema radica en que las operadoras no suelen comprobar fehacientemente la identidad, y los datos requeridos -como el domicilio, fecha de cumpleaños, número de documento o nombre- son de relativamente fácil acceso, especialmente en el caso de personas públicas.
Una vez que el atacante logra engañar a las compañías para que le asigne la línea telefónica de la víctima a la tarjeta SIM en blanco, no solo puede recibir las llamadas y mensajes de texto de esta, sino que puede activar WhatsApp y otras aplicaciones de mensajería validando el número telefónico.
Del mismo modo, también puede reestablecer las contraseñas de otras plataformas, si el método de verificación por SMS está activado en estas. “La jueza (María Servini) lo que ha hecho es pedirnos que, como ente regulador, le obliguemos a las empresas a buscar otros mecanismos para garantizar la seguridad de sus clientes”, dijo el vicepresidente del Enacom.
Para ello –indicó López- se utilizará el reconocimiento biométrico. “Si yo digo que perdí mi tarjeta y la quiero sustituir por otra, entonces la empresa me pedirá un reconocimiento facial para saber quién es la persona que lo pide”, ejemplificó. De todas formas -aclaró- son “estadísticamente muy bajos” los casos de “SIM Swap”.