Las acciones seguirán atractivas en la plaza local pese a la baja en Wall Street
Para la Argentina los feriados son un alivio. En dos días el Banco Central se ahorró de vender alrededor de u$s40 millones al público para ahorro. En Nueva York estuvo muy activa la venta de ADR’s y podría alimentar la compra de acciones en Buenos Aires.
Las fuertes bajas de las cotizaciones de los certificados de posesión de acciones de empresas argentinas (ADR’s) en las últimas 48 horas no significan un mal pronóstico para la reapertura de la rueda bursátil. Las acciones siguen siendo codiciadas. Algunos inversores tomaron ganancias y otros compraron los ADR’s, para tomar posiciones en pesos. Lo que sucede es que por el feriado argentino faltaron jugadores a la cita y esto hizo que, con pocos negocios, los precios de los certificados cerraran en baja.
La caída fue atenuada respecto al de la apertura de mini semana financiera local. De todas maneras los bancos en dos ruedas perdieron 5%. No hubo una sola acción ganadora, pero los que vendieron se hicieron de pesos que están prestos a ser reinvertidos en la plaza local donde las ganancias siguen siendo asombrosas.
LOS QUE VENDIERON EN WALL STREET PODRÍAN COMPRAR ACCIONES EN BUENOS AIRES
Pese a que habrá solo tres ruedas de operaciones, se descuenta que serán intensas. El default no es una traba para operar con papeles y bonos argentinos en dólares que están dando la renta más alta del planeta.
Hoy en la Argentina el mercado es un juego de futuros porque los movimientos de dinero ignoran el presente. Son tomas de posición frente a lo que vendrá después de las elecciones de octubre.
Y es tan real esta situación que por caso en el mercado financiero las cuevas que cambiaban cheques tuvieron que cambiar de rubro porque no hay empresas de primera línea que estén dispuestas a pagar 7% mensualpara que les adelanten el dinero. Como el consumo está en baja no hay necesidad de reponer stocks ni de comprar insumos para fabricar nuevos productos, también bajó la emisión de cheques. La liquidez ahora busca destino en el mercado financiero.
De la segunda línea no se puede hablar porque nadie quiere esos documentos que tienen grandes posibilidades de ser rechazados en la ventanilla del banco.Por eso muchos operadores se están dedicando a prefinanciar exportaciones que tienen como garantía el ingreso de las divisas.
La caída del dólar libre del viernes, no hace más que alentar este movimiento de compra de acciones y de bonos. Sin quererlo o sin saberlo, el Banco Central se ha transformado en un asegurador de cambio para los que están operando en la bolsa. Los jugadores se asombran porque pueden hacer saltos mortales con una red que los proteja de las caídas.
EL BANCO CENTRAL SE HA TRANSFORMADO EN UN ASEGURADOR DE CAMBIO
Cada vez que Alejandro Vanoli, titular del Banco Central, aleja la posibilidad de una devaluación brusca, estimula las operaciones bursátiles, al punto que muchos de los tenedores de dólares medianos y pequeños, se preguntan si están haciendo un buen negocio. Si no es conveniente vender una parte de sus ahorros en divisas para comprar acciones o bonos argentinos.
Las consultas a los bancos para variar la cartera van en aumento y sus fondos de inversión locales están captando más clientes para operar en acciones y bonos. Para ingresar a estos mercados financieros a través de una entidad se necesita un mínimo de 1.000 pesos.
La Bolsa está creciendo y sus montos de negocios coquetean con el techo simbólico de 400 millones de pesos diarios.
Buena señal para las reservas
La otra buena noticia para el Banco Central es la suba del oro de 0,40%, a u$s1.193,88 por onza troy. El metal precioso subió 4,7% en las últimas cinco ruedas. Esto implica una ganancia de casi u$s120 millones para las reservas que están compuestas por 70 toneladas del metal precioso.
Esta suba del metal se verá reflejada en los próximos números de reservas en divisas, pero no significa que se haya detenido la sangría. El costo de mantener al dólar cerca de 13 pesos es elevado.
La plaza del dólar – ahorro a partir de esta semana comenzará a recalentarse. En la reapertura del mercado local los bancos deberán soportar la demanda de los que no compraron por el feriado puente. Como se sabe, cada autorización de compra de la AFIP tiene un plazo de 72 horas para ejecutarse. Por otra parte, el fin de mes se aproxima.
Como los operadores ven que el Banco Central va a cubrir todas las posturas de compra del dólar, no se inquietan: seguirán apostando a bonos y acciones, más allá de alguna toma de ganancias. Si bien hay quienes quieren vender, una fila de compradores está en lista de espera.