La selección de básquet de cara al pre olímpico
El base cordobés habló después del primer día de trabajo de la Selección Mayor, que se prepara en Mar del Plata de cara a los Juegos Panamericanos de Toronto. Sus sensaciones por volver a ponerse la camiseta de Argentina y el crecimiento tras su primera temporada en el Real Madrid.
La Selección Argentina es un motor constante para Facundo Campazzo. El cordobés tiene un sentimiento especial para la camiseta celeste y blanca, por eso no es casualidad que se lo haya visto muy metido en el inicio de los entrenamientos en Mar del Plata, pensando en los Juegos Panamericanos de Toronto después de lo que fue su primera temporada en el Real Madrid de España. Pese a sus 24 años, la voz de líder es cada vez más clara en las prácticas y él se siente cómodo, a gusto. Y, claro, también muy feliz por estar nuevamente con viejos compañeros y amigos, como por ejemplo con Nicolás Laprovittola, su pareja en el armado y en la habitación de la concentración. Campazzo, amado por la gente de la ciudad que lo vio brillar con Peñarol, habló tras el primer día de trabajo de la preselección.
-¿Cuáles son las primeras sensaciones que se te vienen por estar nuevamente en Argentina?
-Son muchas emociones juntas. Estar en la Selección nuevamente, con un grupo nuevo y muy unido, y encima en Mar del Plata, ciudad que me trató muy bien durante siete años. Volver a picar una pelota en el Polideportivo me va a traer sentimientos encontrados. Quiero disfrutar, pero siempre teniendo la cabeza metida en la Selección.
-¿Tenías muchas ganas de integrarte a este grupo, no?
-Sí. Cuando estaba allá en España tenía la cabeza en entrenarme y prepararme para esto, para llegar lo mejor posible físicamente, para tratar de ayudar al equipo. Cuando se terminó toda la temporada en Madrid, quería volver y no perder tiempo para ya estar concentrado acá.
-¿Cómo manejás un poco el tema de la inactividad en el último tiempo para poder estar a la par de los demás?
-El ritmo de juego uno lo va a encontrar a medida que pasen los entrenamientos y los amistosos, por ese tema no estoy preocupado. Después, físicamente me estuve preparando, entrenado horas extra porque en las prácticas durante los playoffs el Madrid hacía más scouting que otra cosa, así que yo buscaba entrenarme por otro lado. Me encuentro bien, creo que vine mejor que en otros años. Obviamente se puede mejorar. Voy a tratar de ir poniéndome a punto a medida que pasen los días, esa va a ser la mejor manera de encarar todo.
-El entrenador Sergio Hernández acaba de plantear que no hay un objetivo para la competencia en los Panamericanos, pero sí quería encontrar un equipo dentro de un plantel con promedio de 24 años. ¿Te sentís en un lugar de liderazgo dentro de este equipo?
-Tuve la suerte de jugar los Juegos Olímpicos, después un Mundial con Nico (Laprovittola). Creo que junto a Marcos (Mata) y Selem (Safar), que somos los mayores o los que estamos hace unos años, tenemos que ayudarnos entre todos. Si cada uno aporta su experiencia a un mismo objetivo, creo que vamos a conseguir cosas importantes. Como dijo Sergio, no tenemos un objetivo claro para los próximos torneos, sino que tenemos que empezar a hacer historia de menor a mayor. Obviamente nos vamos a equivocar, y también algunos van a extrañar a los Ginóbili o los otros monstruos que estuvieron en los últimos años. Hay que ir haciendo historia de a poquito. Acá no hay un líder, somos todos uno y empezamos a empujar desde este momento.
-Lástima que les toca arrancar un trabajo con un plantel diezmado por la ausencia de los jugadores que están jugando la final de la Liga Nacional.
-Sí, hay varios jugadores de Quimsa y de Gimnasia que no pueden estar, pero nunca metimos excusas. Somos los que estamos ahora y juntos vamos a afrontar lo que viene. Son jugadores de gran calidad los que faltan, como Nicolás Aguirre que está teniendo una gran temporada, o Fede Aguerre que la está rompiendo toda en esta Liga. Obviamente que se los necesita, pero nosotros tenemos que estar mentalizados en nuestro trabajo, en lo que nos diga el entrenador, que es nuestro líder de cabecera, y afrontar todo lo que viene.
-¿Cómo imaginás que va a jugar este equipo, qué características va a tener?
-Sergio más o menos nos dio una idea: tratar de defender duro, correr el contraataque y ser inteligentes. Tenemos jugadores para eso, hay jugadores de muchísima calidad para este sistema. Y después debemos aportar lo que nos caracteriza a nosotros: el corazón, la entrega, los huevos. Si nosotros ponemos el corazón, somos aguerridos y dejamos la vida en cada pelota, el buen juego va a venir solo.
-Más allá de ahora tener la cabeza en la Selección, ¿qué balance hiciste de tu primer año en el Real Madrid?
-Positivo. Personalmente me había acostumbrado a jugar 30 minutos con Peñarol, y de un día para el otro pasé a jugar 10, a veces 15 o directamente no jugar. Pero a pesar de eso el balance fue positivo. Entrenándome con mis compañeros estuve a la par, me sentí del mismo nivel que ellos, trataba de competirles siempre. Y después estuvieron los títulos, que cuando vienen son bienvenidos, eso queda siempre en cada jugador. Fue positivo el hecho de entrenarme con ellos y ver la calidad de jugadores que nos enfrentamos.
-¿Qué te parece que Peñarol no haya llegado hasta los últimos tramos de la Liga?
-Lo seguí todo lo que pude por el tema horarios. Siempre nos acostumbramos a verlo entre los primeros puestos. Es fácil llegar, lo difícil es mantenerse, pero así y todo Peñarol luchó hasta el final. No tuvo una buena temporada, pero dejaron lo mejor de cada uno. Lo agarró un Gimnasia muy firme y sólido, con los roles bien definidos y un gran entrenador, y lo pagó caro.
-¿Qué cambio ves del Campazzo que se fue de Peñarol a este que volvió del Real Madrid?
-Me considero un jugador mucho más maduro. Creo que el hecho de ver a grandes bases como Sergio Rodríguez y Sergio Llull me sirvió muchísimo para mi lectura, para conocer más y ser más abierto mentalmente. Así que tanto física como mentalmente me considero mucho más maduro que el año pasado.
Fuente: InfoLiga.com
