La Presidenta, con los radicales de Moreau
Dispuesta a conseguir apoyos en este año electoral clave, Cristina Kirchner cerrará mañana un congreso del autodenominado radicalismo popular en Parque Norte, el ala del partido centenario que conduce Leopoldo Moreau desde el Movimiento Nacional Alfonsinista.
La Presidenta confirmó en las últimas horas su presencia para intentar sacar provecho de la disputa dentro de la UCR tras el acuerdo que selló el presidente del partido, Ernesto Sanz, con el macrismo.
La idea es que Cristina sea la única oradora del encuentro en el que ese sector afín a la Casa Rosada le entregará un documento con los resultados del congreso que comenzará hoy, en el que ratificarán la firma de un acuerdo estratégico con el Frente para la Victoria. De esa manera, intentarán colarse en las listas de candidatos que arme el Gobierno para las próximas elecciones.
Ayer, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, había dado una pista del interés oficial en sumar distintos sectores descontentos de la conducción nacional al invitar a los díscolos del acuerdo UCR-Pro-CC al oficialismo. “Estamos ante una situación indeseable para los hombres y mujeres de filiación radical que tienen una visión progresista y seguramente están descreídos y enojados”, planteó, y dijo estar convencido de que “esa gente no se va a quedar callada la boca”.
El acto que cerrará mañana la Presidenta concentrará al radicalismo que ya se había alineado al oficialismo y no sumará nuevos integrantes, como el caso del sector que se opuso al acuerdo que impulsó Sanz con el macrismo, como Julio Cobos, Gerardo Morales o Eugenio Nito Artaza, vinculados con el massismo.
La decisión de la Presidenta de acercarse a los dirigentes que conforman el espacio del radicalismo popular tuvo su anticipo el lunes pasado, cuando designó a Leandro Santoro, yerno de Moreau y referente de la agrupación de jóvenes Los Irrompibles como nuevo subsecretario para la Reforma Institucional y Fortalecimiento de la Democracia. Tanto él como Moreau suelen asistir a los actos en la Casa Rosada y fueron parte de la comitiva presidencial que en septiembre del año pasado visitó el Vaticano y Nueva York..
