La ONU y la UE condenaron el uso excesivo de la fuerza en Colombia
La ONU y la Unión Europea (UE) condenaron el uso “desproporcionado” de la fuerza en las protestas en Colombia contra el proyecto de reforma fiscal -ya retirado- del presidente, Ivan Duque, que dejaron casi una veintena de muertos.
“Estamos profundamente alarmados por los acontecimientos ocurridos en la ciudad de Cali en Colombia la pasada noche, cuando la policía abrió fuego contra los manifestantes que protestaban contra la reforma tributaria, matando e hiriendo a varias personas, según la información recibida”, declaró en Ginebra Marta Hurtado, vocera de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Hurtado lanzó además un llamado a la calma antes de una nueva jornada de manifestaciones, prevista para el miércoles.
“Nuestra oficina en Colombia está trabajando para verificar el número exacto de víctimas y establecer las circunstancias de estos terribles incidentes en Cali”, dijo Hurtado.
La vocera agregó que los “defensores de derechos humanos también informaron que fueron acosados y amenazados”.
“Dada la situación extremadamente tensa, con soldados y policías desplegados para vigilar la protesta, hacemos un llamado a la calma”, declaró Hurtado.
“Recordamos a las autoridades del Estado su responsabilidad de proteger los derechos humanos, incluido el derecho a la vida y a la seguridad personal, y de facilitar el ejercicio del derecho a la libertad de reunión pacífica”, agregó la vocera.
“Resaltamos también que los agentes encargados de hacer cumplir la ley deben respetar los principios de legalidad, precaución, necesidad y proporcionalidad a la hora de vigilar las manifestaciones”, subrayó.
Hurtado concluyó que “las armas de fuego sólo pueden utilizarse como último recurso ante una amenaza inminente de muerte o de lesiones graves”.
En la misma línea, la UE aseguró que está siguiendo de cerca la situación y condenó “los actos de violencia”.
“La UE condena estos hechos de violencia” que afectan “el legítimo derecho a la protesta y a la reunión pacífica, así como a la libertad de expresión”, manifestó el vocero del servicio diplomático de la institución, Peter Stano.
Antes de la ONU y la UE, varias ONGs, entre ellas Human Rigt Watch y Temblores, corroboraron la violencia policial denunciada por los manifestantes.
En total, 18 civiles y un policía murieron desde el inicio de las protestas contra la reforma fiscal, según un balance de la Defensoría del Pueblo.
Por su parte, el Ministerio de Defensa informó de 846 heridos, de los cuales 306 son civiles.
La escalada de la violencia obligó a Duque a retirar el proyecto el domingo pasado, lo que le costó la renuncia de su ministro de economía, que ya fue reemplazado por José Manuel Restrepo, hasta ahora titular de Comercio, Industria y Turismo.
Pese a la marcha atrás, el Comité Nacional del Paro (CNP), que agrupa a unas 40 organizaciones, redobló la apuesta y convocó a marchar mañana porque “la gente en las calles está exigiendo mucho más que el retiro de la reforma tributaria”, y lanzó un nuevo pliego de pretensiones.
En ese sentido, llamaron a desmilitarizar las ciudades, castigar a los responsables de agresiones contra manifestantes y retirar un proyecto de ley que pretende reformar la salud local en tiempos de crisis por la pandemia y disponga una renta básica más alta.
Duque propuso redactar un nuevo proyecto de reforma que descarte los principales puntos de discordia: el aumento del impuesto al IVA para servicios y bienes y la ampliación de la base de contribuyentes con impuesto de renta.