La exfiscal Fein insistió con que Nisman murió el 18 de enero
La ex fiscal Viviana Fein volvió a defender hoy su tarea al frente de la investigación de la muerte de Alberto Nisman al reiterar que el fallecimiento se produjo el domingo 18 de enero de 2015 y no el sábado 17, como sostiene Sandra Arroyo Salgado, y al puntualizar que el técnico informático Diego Lagomarsino está imputado sólo por haber facilitado el arma de la que salió la bala que terminó con la vida del ex titular de la UFI-Amia.
“Según las constancias, hasta que yo me retiré de mi función, se estableció por la junta médica de manera categórica que la data de la muerte desde la autopsia, 8 de la mañana del lunes, se determinó en 24 horas”, afirmó Fein en declaraciones formuladas a Radio 10, con lo cual ubicó en el domingo 18 de enero la fecha de la muerte del fiscal.
De esta forma, volvió a salir al cruce de la hipótesis repetida por la jueza Arroyo Salgado, ex esposa del fiscal, quien planteó en distintas entrevistas realizadas la última semana, que la muerte del fiscal se produjo entre la noche del sábado 17 y la madrugada del domingo 18.
En este sentido, la ex fiscal Viviana Fein, quien estuvo a cargo de la investigación de la muerte de Nisman durante los primeros 11 meses, aseguró que en el expediente se pudo determinar que el ex fiscal general ingresó a su computadora y se conectó a Internet el domingo por la mañana.
“Está acreditado en la pericia de Cibercrimen que hubo una conexión en Azucena Villaflor, en el piso 13. El diario que Nisman solía leer fue arrojado a las nueve de la mañana del domingo. Nisman, a esa hora, ya había consultado informáticamente”, indicó la fiscal, en referencia a lo que habría sucedido ese día en el departamento en el que vivía el entonces titular de la UFI-Amia, en Puerto Madero.
Consultada por el rol de Lagomarsino, la ex fiscal del caso aseguró, mientras ella estuvo a cargo de la investigación, no surgieron elementos que probaran que se había tratado de un homicidio y que el técnico informático estuviera involucrado.
“Nunca tuvo orden de captura. Pedí la prohibición de salida del país y la jueza (por Fabiana Palmaghini) se hizo eco de forma inmediata. La única imputación por mi parte que debí hacerle es la facilitación del arma. Está imputado como facilitador del arma a Nisman”, remarcó la ex funcionaria judicial, quien estuvo a cargo de la investigación hasta diciembre del 2015 y dejó su cargo en abril pasado, al jubilarse.
“No hay otro elemento que eche por tierra lo que dijo Lagomarsino. No se aportaron pruebas de que él haya tenido participación en un hecho más grave”, profundizó Fein, quien, además, remarcó que “nadie pidió la indagatoria en esta causa”.
Otro punto que Fein indicó para justificar la situación procesal de Lagomarsino fue el testimonio de Néstor Durán, el custodio que declaró haber hablado con Nisman telefónicamente tras entregarle un sobre a un periodista por pedido del fiscal.
“El sábado a la noche, Nisman recibe un llamado a las nueve. (Durán) ratificó que, cuando entregó el sobre a un periodista, lo llamó a Nisman” y el fiscal le dijo que podía retirarse, relató Fein, quien precisó que eso sucedió a las “nueve de la noche, horario en que Lagomarsino ya no estaba en el inmueble”.
En las declaraciones que formuló esta mañana, Fein volvió a asegurar que nunca tuvo pruebas contundentes para inclinarse por ninguna hipótesis en relación a las circunstancias en que se produjo la muerte del fiscal Nisman: “Si yo hubiese estado convencida durante los 11 meses que tuve la causa de que era suicidio, instigación u homicidio, hubiera emitido un dictamen”, repitió.
La ex fiscal defendió su actuación y dijo que se sintió dolida porque, al cuestionar su accionar, muchas veces se le faltó el respeto. En esos cuestionamientos, Fein incluyó a Arroyo Salgado: “Lo que no se puede es atacar a un colega infundadamente. Yo fui magistrada, la doctora Arroyo Salgado lo sigue siendo. Hay que mantener un respeto mutuo entre las personas”, consideró.
“Me molestó cuando, en muchos medios, de manera peyorativa, decían que la doctora chancleteó en la sangre. Nadie afectó patrones de sangre en el baño. El primero que entra al departamento es el personal policial de fotografía y videofilmación. Hay fotografías y filmaciones sin presencia humana, que permitieron elaborar los informes de querella, defensa y trabajar en la pericia criminalística”, aseveró.