La empresa PUMA cerró una de sus plantas en La Rioja y echó a todos sus empleados
La empresa fabricante de zapatillas PUMA cerró su planta ubicada en la ciudad riojana de Chilecito, con lo cual quedaron sin trabajo 40 personas. Según los empresarios, el cierre se debió a la falta de actividad en los talleres de aparado o costuras, motivada por la crisis que vive el sector del calzado a raíz de la importación.
La firma internacional Unisol indicó que indemnizará con el 120% de los haberes a sus trabajadores: un 100 por ley y otro 20% como “premio”, más un compromiso de los empresarios de dejar la maquinaria utilizada en la planta al Estado riojano para que disponga de ellas.
En un comunicado, la compañía indicó que “Puma Argentina se ha visto obligada a tomar esta decisión, motivada por los cambios tecnológicos en la producción de capelladas, con la finalidad de mejorar la eficiencia en los procesos productivos, para garantizar la continuidad del negocio y asegurar los puestos de trabajo de las más de 800 personas que continúan trabajando en las plantas de la empresa, el edificio corporativo y las tiendas propias”.
El plan de “reestructuración” de esta empresa en la Argentina comenzó en junio de 2017 cuando despidieron a 180 empleados de sus plantas de las ciudades riojanas de Chamical y Chilecito.
“La empresa ya venía con un proceso de achique y esto fue debido a la decisión del Gobierno nacional de abrir las importaciones, que afecta a la industria del calzado en el país y en la provincia en particular”, cuestionó el secretario general del gremio del calzado, Raúl Carrizo.
En este sentido, reprochó que durante este gobierno “sacaron a 570 trabajadores en La Rioja de la industria del calzado” y enfatizó que “la política de abrir las importaciones perjudicó a los trabajadores porque ahora las empresas traen todas las capelladas de los países asiáticos”.