La CGT rechaza cambios en la Ley de Contrato de Trabajo
La mesa chica también criticó las modificaciones propuestas al sistema previsional.
La Confederación General del Trabajo (CGT) rechazó cualquier posible cambio a la Ley de Contrato de Trabajo (LCT) pretendido por el gobierno de Mauricio Macri. La mesa chica se reunió en la histórica sede de la calle Azopardo 802 para debatir la reforma general anunciada por el Presidente en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
El triunvirato, integrado por Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, aseguró hoy que no negociará la LCT. El Gobierno, a pedido de las empresas privadas, impulsa un cambio en el cálculo de la indemnización para reducir el pago que hace una compañía cuando despide a un trabajador.
Desde la mesa chica también criticaron la reforma previsional que pretende imponer el macrismo. “Las modificaciones a la fórmula de la movilidad jubilatoria por inflación futura generarían un ahorro que el Gobierno procura utilizar para compensar el Fondo del Conurbano”, consideraron.
De esta manera, la reforma general de Macri provocará largas sesiones cuando el proyecto oficial ingrese al Congreso. “No pasará por el Parlamento sin cambios”, avisó días atrás Daer. La CGT aceptó negociar con el Gobierno sin dejar de lado los históricos reclamos del movimiento.
El Gobierno quiere que las empresas formalicen en primera instancia a 300 mil trabajadores que actualmente están en negro para luego avanzar con los otros 3,7 millones de argentinos en esa situación.
El Ejecutivo, a cambio, les ofrece a las compañías una batería de beneficios: la extinción de la acción penal (el empleado no podrá hacerle juicio al empleador por haber estado en negro), la rebaja de aportes, la condonación de multas y la rebaja de las indemnizaciones por despido.
El Presidente, al anunciar el proyecto en el CCK, avisó que buscará implementar más cambios: “Seguiremos combatiendo los excesos en la litigiosidad porque la mafia de los juicios laborales es uno de los principales enemigos de la creación de trabajo en nuestro país”. La CGT no se lo hará fácil.