Jubiladas trans: pocas acceden al beneficio a 6 años de la Ley de Identidad de Género
Las mujeres trans que lograron jubilarse con su nuevo nombre siguen siendo “contadas con los dedos de las manos” a casi seis años de aprobada la Ley de Identidad de Género, por lo que fue noticia la semana pasada el caso de Jorgelina Pineda (60 años), la primera travesti que realizó el trámite en la provincia de Santa Fe.
Las organizaciones que defienden la diversidad sexual advierten que si este beneficio de la seguridad social sigue siendo inalcanzable es por el efecto combinado de dos males de la discriminación: “una expectativa de vida de sólo 35 años” y “la falta de acceso al mercado laboral formal”.
Una de las mujeres trans próximas a jubilarse en la ciudad de Buenos Aires a pesar de haber hecho su transición antes de los 20 años es Valeria del Mar Pereira (61), sobreviviente de tres décadas en situación de prostitución y del centro clandestino de detención El Pozo de Banfield, donde estuvo detenida 15 días en 1977 por travesti.