Investigan maltrato a una beba de cuatro meses en una guardería de La Plata
La justicia penal platense investiga a la docente de una guardería del barrio norte de La Plata denunciada por maltratar a una beba de cuatro meses, lo que quedó registrado en imágenes tomadas por una cámara instalada dentro del establecimiento.
Fuentes de la investigación precisaron que la madre de la beba, Carolina Penzi, radicó una denuncia en octubre pasado cuando su hija tenía cuatro meses y asistía a la guardería “Aventuras en pañales”, ubicada en las calles 40 entre 8 y 9 de la capital bonaerense.
De acuerdo a los voceros, en agosto de 2018 la mujer retiró de la guardería a su beba y advirtió que tenía la cara lesionada con rasguños y hematomas.
Luego, radicó la denuncia en la fiscalía penal en turno, a cargo de Marcelo Romero, y la Justicia solicitó al establecimiento los videos de las cámaras de la sala, que fueron incorporados a la causa.
En las cintas “se pudo constatar que, efectivamente, la maestra que por entonces tenía bajo su cuidado a cinco bebés, arrojó bruscamente a Pilar contra un huevito, le gritó y le tapó la cara con una toalla” y “también se ve cómo la levanta de los bracitos y la zamarrea”, precisaron las fuentes.
Tras conocerse el hecho, la maestra cuyas iniciales son P.G., fue separada de la guardería.
P.G. está notificada de la causa por “lesiones leves” pero aún no fue procesada. Aunque no hay testigos de la agresión porque la maestra estaba sola en el aula, se les está tomando declaración a las docentes que trabajaron con ella y la próxima semana declarará la directora, tras lo cual se espera una definición sobre la situación de la docente.
Penzi realizó ayer un posteo en la red social Facebook en el que contó que “después de siete meses de angustia” pudo ver el video “en donde se ve cómo maltratan a Pili”.
“Me la devolvieron con lesiones en el brazo y rostro que tardaron en resolver una semana”, añadió.
La mamá aseveró que “fue muy cruel y doloroso para mí ver cómo P.G. la sacudió bruscamente, cómo la sujetó de los brazos con violencia, cómo la revoleó varias veces golpeando su cuerpito contra el huevito y cómo en un montón de oportunidades le cubrió su rostro y todo el cuerpo con una manta ejerciendo fuerza con una mano sobre su cara”. Penzi pidió “justicia” y “que se clausure el jardín para siempre”.