Importaciones falsas: la Aduana allanó 18 bancos por una fuga de US$400 millones
La Dirección General de Aduanas (DGA) realizó este jueves 51 allanamientos en el marco de una denuncia por la fuga de US$ 400 millones que realizaron 176 empresas a través de falsas importaciones con el Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI) que fue sustituido en octubre de 2022 por el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA).
Los allanamientos se realizaron en 18 bancos, ocho estudios contables y 25 sociedades en el microcentro porteño, y las ciudades de Rosario, Córdoba y Bahía Blanca en conjunto con Policía Federal Argentina, División Lavado de Activos, informó el organismo.
El procedimiento se lleva adelante en el marco de la causa 452/23 del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 2 a cargo de Pablo Yadarola y de la Fiscalía Nacional en lo Penal Económico N° 6 a cargo de Jorge Dahlrocha.
La maniobra realizada por las empresas consistió en simular importaciones, utilizando documentación y SIMIs falsas, con el único objetivo de fugar divisas al exterior.
“Básicamente lo que hicieron fue simular operaciones de importación. Nunca importaron nada a la Argentina y giraron al exterior US$ 400 millones”, precisó el titular de la DGA, Guillermo Michel, este mediodía en diálogo con los medios de comunicación.
La investigación surge de un cruce sistémico efectuado por la Aduana comparando los giros de divisas cursados con los bancos con las importaciones que nunca efectuaron los falsos importadores.
En el caso de algunos estudios contables y jurídicos, se armaban las empresas y en otros ofrecían aumentar la capacidad económico financiera a quienes giraban las divisas.
Muchas de las empresas allanadas -señaló Aduana- eran “cáscaras” pues no tenían empleados ni capacidad económica y financiera para realizar estos giros.
Además, una gran cantidad de las mismas no estaban habilitadas como importadores o exportadores, sino que fueron incluidos en la base de usuarios de comprobantes apócrifos y creadas sólo para realizar este tipo de conducta ilícita.
Los giros al exterior por las falsas importaciones se efectuaron a 146 firmas estadounidenses de dudosa constitución –fundamentalmente LLCs radicadas en Delaware y La Florida- que están vinculadas a argentinos.
La Aduana le informó de la situación al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos a través de su Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (Homeland Security Investigations, HSI), organismo que recabó información de las empresas en ese país y brindó detalles sobre los beneficiarios finales de las empresas radicadas allí.
De dichos datos, se desprendió que las 146 firmas estadounidenses a las cuales se giraron las divisas están vinculadas con argentinos.
“La plata que se fugó de Argentina terminó en cuentas de sociedades del exterior vinculadas a argentinos. Estas son maniobras que claramente son ilegales y que consiste en obtener dólares, sacarlos del sistema financiero de manera ilegal para luego revenderlos en el mercado blue o al de Contado con Liquidación”, subrayó Michel.
El titular de Aduana confirmó que se detuvieron a dos personas en el marco de los allanamientos, además de secuestrarse mercaderías.
Las SIMIs falsas, que dieron luz verde al giro de divisas, habrían sido realizadas con la connivencia del personal del sector de comercio exterior de diversos bancos y financieras, según se informó.
“Podemos decir que los directorios y gerentes de los bancos no están involucrados, pero si lo estuvieron empleados infieles de los sectores de comercio exterior. Eso es lo que tiene determinado la justicia hasta ahora. En las escuchas realizadas se detectó una gran cantidad de empleados de bancos siendo parte de la maniobra”, precisó Michel, quién aclaró que la causa se encuentra en secreto de sumario.
Dichos empleados “pedían determinados montos a cambio de liberar de manera irregular estos giros” sin “la debida documentación”.
Los dos detenidos, precisamente, son empleados de dos entidades financieras.
El sistema SIMI no tenía trazabilidad del giro contra la importación de mercadería, lo cual fue solucionado con la implementación del SIRA, que contiene un cruce sistémico y una cuenta corriente con el Banco Central (BCRA).