Hígado graso: los alimentos que debes consumir y los que no para mejorar este problema
La enfermedad del hígado graso no alcohólico o simplemente hígado graso, es causada por una gran acumulación de grasa en las células hepáticas.
Esto puede provocar que el órgano se inflame y ocasionar otros daños similares a los detectados por el consumo de alcohol, de acuerdo con la información de Mayo Clinic.
Los pacientes con hígado graso tienen como principal enemigo a las grasas y a los azucares en su dieta, ya que son estos los que provocan que su hígado se inflame, por lo cual deben seguir un estricto régimen alimenticio.
Alimentos que debes evitar a toda costa
Frituras
Nada frito es saludable para el hígado graso, por lo cual es recomendable limitar al máximo su consumo.
Mantequilla
Debido a su alto contenido de grasa, la mantequilla es otro de los alimentos de no debes comer. Dependiendo del plato, podés sustituirla por margarina (en pequeñas cantidades), aceite de oliva o aceites vegetales, pero lo mejor es no usar grasa para cocinar.
Azúcares procesadas
Galletas, pastelillos y todos aquellos alimentos procesados no te benefician en nada, así que simplemente no los consumas.
Harinas blancas
Eso incluye todo tipo de pan que no sea integral, como los bolillos, el pan de caja, las roscas, las donas y los bollos.
Alcohol
Las bebidas embriagantes atacan principalmente a tu hígado, y siendo precisamente este órgano el que tiene el problema, no es una buena idea empeorar la situación.
Refrescos y jugos envasados
Están prohibidos por su alto contenido de azúcar, la cual al ser metabolizada por el cuerpo se transforma en grasa.
Comida rápida
Por donde lo veas, sin importar que incluyan ensalada o fruta, la comida rápida no es una buena opción alimenticia para alguien que padece hígado graso.
Alimentos que SÍ están permitidos
Alcachofas
Ricas en un antioxidante llamado silimarina, el cual es el componente principal en el cuidado del hígado. Las alcachofas contribuyen a la limpieza y desintoxicación de este importante órgano.
Brócoli
Es muy rico en azufre, indispensable para la desintoxicación del hígado. Se recomienda comerlo entre 4 y 6 veces a la semana, en pequeñas cantidades.
Pan y arroz integral
Estos alimentos presentan un índice glucémico menor al de su contraparte refinada, por lo cual son ideales para las personas que padecen diabetes o hígado graso.
Además, ayudan a disminuir el colesterol malo y son buenos para combatir al estreñimiento.
Manzana
Contiene pectina, la cual ayuda a reducir el colesterol en la sangre. También tiene propiedades diuréticas, por lo tanto te ayudará a no retener líquidos.
Piña
Esta fruta es rica en antioxidantes, baja en calorías y contribuye a que tu cuerpo no retenga líquidos. Si llegas a tener un gran antojo de algo dulce y te tientan unos pastelitos o algo similar, la piña, como cualquier fruta, es tu mejor aliada para alejarte de esos alimentos que te hacen daño.
Verduras verdes
Todas las verduras verdes, como los berros, las espinacas, las lechugas son ricos en complejo B y en potasio. Estos nutrientes ayudan a tu cuerpo a regular su consumo de energía, mejorar el tono muscular y a eliminar grasa.
Cítricos
La naranja, la mandarina, la lima y la toronja son muy buenas fuentes de vitamina C, nutriente que es muy importante para desinflamar al hígado y reforzar el sistema inmunológico.
Proteínas sin grasas
Es muy importante no disminuir la ingesta de proteínas, pero a su vez no elevar el consumo de grasas, así que el pollo, el pescado, la carne magra, los lácteos desnatados y la clara de huevo son opciones muy saludables para tu nutrición.
Alga
Al igual que la alcachofa, contiene grandes cantidades de silimarina, antioxidante esencial para el cuidado de varios órganos, entre ellos el hígado. Se puede consumir en forma de té sin azúcar o como acompañante en las comidas.
Agua
El agua natural es muy buena para mantenerte hidratado y para limpiar al hígado de impurezas. Es muy importante que la bebas simple.