Hasta mañana se puede justificar ante la Justicia la no emisión del voto en las PASO
El trámite es personal y la multa es de $ 50.
A días de la general del 22-O, mañana jueves, por caso, vence el plazo para que aquellos que no fueron a votar el 13 de agosto, justifiquen la “no emisión” de su voto ante la Justicia electoral.
Existe un registro de infractores que se puede consultar on line. Los que no votaron deben hacer el trámite que está autorizado hasta mañana en las secretarias electorales de cada provincia. El procedimiento es sencillo y supone el pago de una multa cuyo valor es simbólico: 50 pesos. Si se acumulan faltazos a votar, se duplica la multa.
Recordá que tenés tiempo hasta el 12/10 para justificar la no emisión de tu voto en las #PASO2017. Hacé click aquí https://t.co/QfoYEqXXpk pic.twitter.com/x3ybkzPnZS
— #Elecciones2017 (@CamaraElectoral) 10 de octubre de 2017
En provincia de Buenos Aires, el 13 de agosto cumplió con la obligación de sufragar el 77,6% del padrón de 12.250.862 electores. Es decir: votaron 9.510.311.
El 22,4% restante (2.740.551 electores) está integrado, a grandes rasgos, por jóvenes de entre 16 y 18 años que están empadronados pero no tienen la obligación de votar, al igual que los adultos de 70 años.
También están “justificados” los que el día de la elección están a más de 500 kilómetros de su lugar de votación, el personal de organismos de seguridad o servicios públicos que estén abocados a tareas ese día, personas enfermas o incapacitadas de movilizarse, y funcionarios y auxiliares judiciales.
Mauricio Macri, que protestó contra el sistema de primarias, supo argumentar que a la gente le cansaba ir a votar tantas veces. En la Justicia usan otro argumento: como las primarias suelen esquivar la competencia interna, la PASO se convierte más en una encuesta grande, inmensa, al 100% porque más allá de lo simbólico -que es relevante-, deciden poco.
Por eso, tanto Cambiemos, como Unidad Ciudadana, 1Pais, Cumplir y el FIT están, en este tramo, enfocados en seducir a los que no votaron en las primarias, cada uno en su segmento particular: unos en el interior provincial, otros entre los jóvenes, otros entre los anti-algo. Ahí juega la campaña.