Granja Tres Arroyos paraliza actividades y deja en vilo a más de 1.000 trabajadores
La situación en Granja Tres Arroyos, la principal empresa avícola de Argentina, alcanzó un punto crítico.
Este miércoles, los trabajadores de la planta La China, ubicada en Concepción del Uruguay, se encontraron con un cartel que anunciaba la suspensión de la faena “hasta nuevo aviso”.
Esta medida inesperada dejó en la incertidumbre a más de 1.000 familias que dependen directamente de esta fuente laboral.
El conflicto se remonta a finales del año pasado, cuando la empresa eliminó adicionales salariales que los empleados percibían desde hacía años y que representan una reducción de entre el 11 y el 20% de sus ingresos.
Más concretamente, alegando una crisis financiera, Granja Tres Arroyos presionó para que los trabajadores aceptaran recortes salariales y firmaran convenios preventivos de crisis que implicaban la renuncia a derechos adquiridos.
Ante la resistencia del gremio, la empresa amenazó con despedir a 400 empleados, iniciando con el envío de 80 telegramas de despido a principios de este año.
La intervención del Ministerio de Trabajo resultó en una conciliación obligatoria por 15 días, durante los cuales la empresa debía reincorporar a los despedidos y regularizar los pagos salariales.
Sin embargo, a pesar de la prórroga de esta medida hasta el 24 de febrero, la empresa decidió paralizar las actividades, incumpliendo lo establecido y exacerbando el conflicto.
Miguel Klenner, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA), denunció que la empresa no permitió el ingreso de los trabajadores del turno de las 3 de la mañana y desalojó a quienes ya se encontraban en la planta.
“Con esto, la empresa rompió la conciliación obligatoria que cerraba el lunes. En vez de haber una propuesta, cierra la empresa”, expresó
Ante esta situación, los trabajadores y sus familias organizaron una movilización con el objetivo de solicitar la intervención del intendente José Eduardo Lauritto.
“Hay más de 1.000 familias que están en la calle en este momento. Que este empresario recapacite y que esto también llegue al gobernador”, instó el dirigente sindical.
Según denuncia el gremio, Granja Tres Arroyos está desviando la producción a otras plantas en Gualeguay y Buenos Aires. Esta maniobra es interpretada por el sindicato como un intento de simular una crisis inexistente en la planta de Concepción del Uruguay con el objetivo de reducir el plantel laboral o recortar salarios.
La empresa, por su parte, argumenta que atraviesa una severa crisis financiera que la llevó a presentar un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante la Secretaría de Trabajo en diciembre pasado. Este procedimiento buscaba despedir a 700 empleados o reducir salarios eliminando adicionales equivalentes al 21% de los sueldos. (Ámbito)