Estremecedora carta de Justin Bieber
Como nunca antes lo había hecho, Justin Bieber abrió su corazón a través de una carta que publicó en su Instagram.
Habló de sus adicciones, de los excesos que cometió estando en pareja, de cómo impactó la fama en su vida y de su presente amoroso.
“Es difícil salir de la cama con la actitud correcta cuando estás sobrepasado por tu vida, tu pasado, tu trabajo, responsabilidades, emociones, tu familia, tus finanzas, tus relaciones. Cuando sentís que hay problema tras problema, tras problema. Empezás a ver el día a través de lentes “de temor” y anticipas otro mal día. Un ciclo de sentir decepción tras decepción. A veces incluso podés llegar al punto en el que ya no querés vivir más. Cuando sentís que nunca va a cambiar. Puedo empatizar completamente contigo. Podría no cambiar mi manera de ver las cosas. Soy afortunado por haber tenido gente en mi vida que me impulsa a seguir adelante“, arrancó el artista.
Luego confesó: “Ustedes veían que tenía mucho dinero, ropa, autos, elogios, triunfos, premios, y seguía insatisfecho. ¿Están al tanto de las estadísticas de estrellas infantiles y cómo impacta en sus vidas? Hay una loca presión y responsabilidad puesta en un chico cuyo cerebro, sus emociones, su lóbulo frontal (el de la toma de decisiones), todavía no se han desarrollado. Si a eso le agregás la presión de ser una estrella te hace algo que es medio inexplicable. Saben que no crecí en un hogar estable, mis padres se separaron, no tenía dinero, era joven y rebelde. Mi talento progresó y me convertí en ultra exitoso y todo ocurrió en un lapso de dos años“.
Conmovido, Justin expresó: “Mi mundo entero se dio vuelta de cabeza, pasé de ser un niño de 13 años de una pequeña ciudad a ser adorado de izquierda a derecha por todo el mundo con millones diciendo cuánto me amaban y cuán increíble era. No sé nada sobre ustedes pero la humildad llega con los años. Escuchás estas cosas desde que sos chico y en algún momento empezás a creerlas. La racionalidad llega con los años y también el proceso de tomar decisiones (por eso no se puede beber hasta los 21). Todo el mundo hizo siempre todo por mí así que nunca aprendí los fundamentos de la responsabilidad. Hacia los 18 no tenía conocimiento del mundo real, con millones de dólares y acceso a lo que quisiera. Esto es un concepto que da miedo a cualquiera. A los 20 tomé cada mala decisión que se pueda tomar y estuve junto a, desde la persona más adorada del mundo, a la más ridícula, juzgada y odiada del mundo. Estar en el escenario, según estudios, te da más dopamina que cualquier otra actividad, así que estos enormes altibajos son en sí difíciles de manejar”.
“Podrán ver que muchas bandas y artistas terminan en una fase de abuso de drogas y creo que se debe a no poder manejar esos enormes altibajos de energía que vienen con ser un showman. Sentía que nunca iba a poder cambiar. Me llevó años recuperarme de todas esas malas decisiones, arreglar relaciones rotas y cambiar mis hábitos para relacionarme. Afortunadamente fui bendecido con gente extraordinaria que me ama por lo que soy. Y ahora estoy navegando por la mejor temporada de mi vida: el matrimonio. Que es una increíble, loca y nueva responsabilidad. Aprendés de la paciencia, la confianza, el compromiso, la bondad, la humildad y todas las cosas que te llevan ser un buen hombre. Todo esto para decir que incluso cuando todas las posibilidades estén contra vos, continúes luchando. Jesús te ama, sé bueno hoy, sé audaz hoy, y amá a las personas hoy, no por sus estandars sino por el amor perfecto e infalible de Dios“, concluyó.
Justin dio el “sí” en el registro civil, con Hailey Baldwin y pronto se casarán por Iglesia. (Diario Show)