Escándalo y golpes en una peluquería de Comodoro Rivadavia
La queja de una clienta por un mal trabajo que le quemó el cabello ante el dueño de la peluquería “Fernando Boss”, derivó en una sorpresiva riña con la joven, que al ser víctima junto a su madre de agresión verbal y física por parte del peluquero -según denunciaron-, motivaron la intervención del padre y un hermano que intercambiaron golpes con el profesional de las tijeras que finalmente desembocó en la intervención de varios efectivos policiales.
“Fuí a reclamar por un mal trabajo que me hicieron y todo terminó mal”
Romina es una mujer de 26 años que esta semana festeja el segundo cumpleaños de su pequeña hija y según manifestó ante este diario, quiso cambiar y embellecer su cabello por lo que el miércoles acudió a la peluquería para teñirse, tarea que demandó varias horas por parte de una joven empleada del lugar.
“Estuve varias horas y con el corte me salió en total 1.700 pesos, pero esa noche cuando llegué a mi casa se me empezaron a caer mechones de pelo, entonces me asusté y me largué a llorar y mi mamá entonces lo llamó por teléfono (al peluquero) y le recriminó que me había quemado la cabeza y no me hizo lo que yo le había pedido, entonces la idea que largó el peluquero era pelarme, y mi mamá le reclamó la devolución del dinero”.
Así comenzaba contando Romina el principio de la historia acontecida durante el miércoles, epilogando violentamente en la tarde de ayer cuando apareció con su progenitora en la peluquería. “Mi mamá estaba enojada, empezaron a charlar tranquilamente, pero en un momento dado ambos se levantaron la voz, pero sin insultar, aunque en un momento dado el peluquero insultó diciéndonos “váyanse a la mierda y no les voy a dar ninguna plata”, a lo que seguidamente el peluquero habría intentado primero, empujar a Romina hacia el exterior y luego -siempre de acuerdo a dichos de la denunciante- asestándole una trompada a la madre de la clienta. “Ahí me enojé yo y tenía una especie de cesto con unas pelotitas y le revoleé una pelota y creo que empujé la computadora; a todo esto yo andaba con mi nena en los brazos y este hombre vino a querer pegarme y me empujaba hacia afuera” dijo.
Llegó un momento en que las partes hablaban de llamar a la policía, pero antes, el peluquero habría arrojado al piso el dinero que debía devolver y otro llamado motivó la llegada del padre y un hermano de Romina y hubo un intercambio de golpes entre el padre y el peluquero y la madre de Romina, que por una cuestión de salud entró en un estado de shock que luego la obligaría a ir al Hospital; la policía con varios efectivos debieron interceder para evitar males mayores.
Posteriormente, cada una de las partes denunció a la otra en sede policial, lo que seguramente terminará en los tribunales penales.