El video de Axel, indignado por la muerte de Pelusa
Sentado con el torso echado hacia adelante, bajando la cabeza y perdiendo la mirada en varios momentos, haciendo silencio pero también permitiéndose -o no pudiendo evitar- un exabrupto. Así se lo observa a Axel en un video que subió a su cuenta de Facebook, apenas “un rato” después de haberse enterado de la muerte de Pelusa, la elefanta de 52 años del Zoológico de La Plata.
“¿Cómo podría definir lo que siento? ¿Cómo contarles a ustedes?, porque de alguna manera los involucré en esto… -se pregunta el cantante-. Y no encuentro palabras, más que decir que somos una mierda, somos unos hijos de puta, unos hijos de puta…”.
Ocurre que Axel participa -siendo la voz en off- de la filmación del documental Caravana, la verdadera historia de Pelusa, que iba a mostrar el inminente traslado de la elefanta a un santuario de Brasil. “Estuvimos trabajando para lograr su liberación de la cárcel donde vive desde hace 50 años”, dijo.
Pero en la noche del lunes, con su salud muy endeble (en los últimos meses durmió parada, porque una afección en sus patas le impedía acostarse), Pelusa falleció tras haber sido sedada. Su cuadro era irreversible.
“Creyéndonos superiores a toda manifestación de vida -continúa Axel-, tomamos decisiones sobre los animales. Los explotamos, los torturamos, los encerramos, nos divertimos con ellos, hacemos negocios. Eso demuestra que somos inferiores a ellos, somos tan carentes de amor. No tenemos corazón”.
No obstante, el autor de “Celebra la vida” aclaró -“porque las redes sociales dan para todo”- que el suyo no era un discurso político. No solo dirige sus acusaciones sobre el Gobierno actual, ya que Pelusa llegó al país durante la presidencia de Arturo Frondizi, sino que sostiene que “los responsables somos todos”. Pero, ¿de qué manera? Por lo pronto, Axel advierte que al comprar una entrada para un zoológico “alimentamos este negocio nefasto”.
“Pónganse un segundo en lugar de Pelusa, como si fuera un niño. Porque a los dos años fue arrancada de su madre y encerrada durante 50 años, sin nunca más ver a nadie de su especie. Con ella hicimos algo atroz: le quitamos su esencia -acusó-. Ella ni sabía que era un elefante. No hacía ruido de elefante porque no sabía que era un elefante”.
Axel, quien días atrás había contado que rescata animales “de manera íntima, sin publicidad”, concluyó su mensaje exigiendo la liberación de otros nueve elefantes que permanecen en cautiverio en distintos zoológicos argentinos. (Teleshow)