El Gobierno le respondió al kirchnerismo: “El recuento es imposible de manipular”
Cristina Kirchner y varios dirigentes de Unidad Ciudadana, el espacio que la lleva como candidata, denunciaron en reiteradas ocasiones que el escrutinio provisorio de las PASO del 13 de agosto estuvo manipulado y alertaron de que no están dadas las garantías de transparencia para las elecciones generales del 22 de octubre. Justamente ayer, Jorge Taiana, Leopoldo Moreau, Graciana Peñafort, Rodolfo Tailhade y Gerónimo Ustarroz manifestaron su preocupación “por la falta de respuestas del poder judicial y político” y pidieron que Gendarmería Nacional sea apartada de la custodia de las elecciones generales de octubre, que se realice una auditoria al software con el que se cargan los datos y que el director de la Cámara Nacional Electoral, Alejandro Tullio, renuncie a su cargo. En conferencia de prensa, la ex presidente se mostró en esta línea: “(En las PASO) Ya festejaron una victoria que no fue…”.
Ante esto, Fernándo Álvarez, director nacional electoral, recogió el guante y respondió todas las acusaciones: “El recuento provisional de resultados es de imposible manipulación por varios motivos”, comenzó en diálogo con Infobae. Al respecto, detalló que hay varias etapas de fiscalización. La primera es la partidaria “en todas sus instancias”, empezando por “las mesas de escrutinio”. Luego, según explicó, cuando los telegramas son enviados a los centros de transmisión del Correo por los oficiales y por el comando electoral aparece una segunda instancia de fiscalización: “En este caso va a haber una fiscalización de las defensorías del pueblo de todo el país que están ahí controlando cada una de las digitalizaciones y envíos de los telegramas al centro del Correo oficial en Barracas”. Por último, una tercera fase en donde “los fiscales informáticos están controlando en tiempo real el recuento y carga de información”. En las PASO hubo 178 fiscales partidarios en esta etapa.
Con respecto al software, otras de las acusaciones del kirchnerismo, Álvarez argumentó: “Se muestran los códigos del software que se va a utilizar, se hace un acta con los partidos políticos y en un sobre sellado y lacrado se envía a la Cámara Nacional Electoral (CNE), que es el custodio de que ese es el software que se va a usar en la elección y no otro. En el lacrado firma la DINE y cada uno de los apoderados de los partidos que asisten. Cualquier partido después de las elecciones, si piensa que hubo irregularidades, puede solicitar a la Justicia que se confronte que el software que se utilizó es el mismo que el que está homologado por la autoridad judicial. Por el momento, eso no ha sucedido nunca desde que se realiza el recuento provisional en la Argentina”.
“El software que se usa, que es homologado internacionalmente en su seguridad, es idéntico a los de elecciones anteriores con mayores medidas de seguridad que provienen de la propia actualización tecnológica”, remató el funcionario.
Sumado a esto, Álvarez destacó que las denuncias de Unidad Ciudadana no pasaron de lo mediático: “Ante la Justicia no hay denuncias de fraude, ni planteos ante la autoridad administrativa respecto de las PASO. Desde abril está funcionando el Consejo de Seguimiento de las PASO y las generales. Fue creado por la ley y es un organismo ad hoc que se convoca para cada año electoral, donde los partidos tienen la posibilidad de controlar durante todo el año el proceso electoral y el accionar del Ministerio del Interior a través de la DINE. En todo el año no hemos recibido ningún planteo ni por escrito ni en las deliberaciones de parte de ninguna agrupación política. Incluso hubo una reunión del consejo de seguimiento donde se explicó y se mostraron las curvas del desarrollo de la elección, se las comparó con 2013 y 2015 y quedó claro que no hubo ninguna manipulación. Es virtualmente imposible de manipular”.
En el final, justificó que el horario en el que mostraron los resultados es una “marca histórica” con respecto a otros años: “Terminamos a las 5:40 de la mañana llegando a la medianoche con casi un 90% del escrutinio provisorio a nivel país y en un 75% en la provincia de Buenos Aires. Aspiramos a mejorar esta marca y terminar en las primeras horas de la madrugada con todo el conteo provisional, de manera que nadie tenga que esperar hasta altas horas de la madrugada”.
Pero advirtió: “Nunca puede, por definición, escrutarse al 100% porque siempre es dable esperar el error humano: que los telegramas no sean enviados correctamente compilados, que falten telegramas, que haya telegramas que vayan a las urnas”.
Fuente: Infobae