El gobierno descarta subir las retenciones y busca cerrar con los tres últimos gobernadores
La Casa Rosada se dio hasta el viernes 12 para tratar de cerrar con los tres últimos gobernadores que aún no firmaron la adenda al Pacto Fiscal y que, según apuestan en el Gobierno, podrían terminar acompañando la iniciativa.
Se trata del santafesino Miguel Lifschitz, el formoseño Gildo Insfrán y el chubutense Mariano Arcioni, quienes hasta ahora se vienen resistiendo a firmarla para demostrar su malestar y también para negociar mejores compensaciones para sus provincias.
La adenda ya fue firmada por 18 gobernadores. Hay otros tres mandatarios -Alicia Kirchner, Carlos Verna y Alberto Rodríguez Saá- que ya se sabe no la suscribirán.
“Seguiremos conversando con Lifschitz, Insfrán y Arcioni hasta último momento. Si para el viernes 12 aún no firmaron, igual enviaremos el proyecto a Diputados”, adelantaron a Clarín en el Gobierno.
Por esto, en el oficialismo no especulan con que los tres mandatarios puedan aportar votos para el Presupuesto y la adenda. Pero sumarlas así y todo es clave. Santa Fe, por ejemplo, es una de las tres provincias más grandes del país.
Lifschitz sabe que su firma vale y por eso reclama que Nación se comprometa a saldar la millonaria deuda con su provincia, que se exceptúe de Ganancias a las cooperativas y que se avance con la suba de la alícuota de los Bienes Personales radicados en el exterior.
Por esta suba, que está en la mesa de negociaciones, ingresarían $ 30.000 millones extras. Lo que no avanzaría es la propuesta que hizo el gobernador radical de Jujuy, Gerardo Morales, de aumentar de 4 a 8 pesos por dólar las retenciones. La idea fue tomada con entusiasmo por opositores porque permitiría aumentar la torta a repartir entre las provincias.
Pero ayer en el Gobierno rechazaron que el aumento de las retenciones pueda avanzar. “Es un impuesto transitorio y que no nos gusta. No está en la mesa de negociación subirlas”, dijeron a Clarín en el Ministerio de Economía. (Clarín)