El delantero que siempre le gustó a Gallardo
En lo que fue su vuelta al fútbol argentino, Silvio Romero pasó de resistido por sus condiciones físicas a figura y capitán de Independiente en un abrir y cerrar de ojos. Y la llegada del “9” a Avellaneda, sin lugar a dudas que significó un puñal para Marcelo Gallardo, quien intentó ficharlo en dos oportunidades y nunca lo pudo tener.
Sobre todo ahora que también podría partir Rafael Santos Borré, si es que la dirigencia de River no abona el 25% de su pase. Esto quiere decir que en el peor de los escenarios, el Muñeco tendría que pensar en alguna solución para mantener un plantel competitivo, ya que sólo le quedarían Lucas Pratto y Matías Suárez como titulares en el ataque y dos juveniles en el banco de suplentes, uno de ellos Julián Álvarez.
Y pensar en Romero es algo utópico, en medio de la crisis económica por el coronavirus, debido a que el conjunto de Núñez hoy no está en condiciones de poner plata por nadie en el mercado, y menos en el local, pensando en una hipotética operación con un equipo de jerarquía como es el Rojo. Eso sin contar que también le debe plata a Belgrano por Matías Suárez y a Godoy Cruz por Fabrizio Angileri.
Sin Ignacio Scocco, las otras incógnitas en el mundo River giran en torno a los futuros de Gonzalo Montiel y Lucas Martínez Quarta, ambos sondeados por varios clubes europeos, por lo que la prioridad en estos meses será negociar algunas ventas que puedan aparecer y no salir al mercado salvo una extrema necesidad. Obviamente que Gallardo es parte de esta idea por lo que, en principio, no se esperan refuerzos.
Fuente: Sportia