El Banco Central cree controlar la inflación y prepara una nueva baja en la tasa
El presidente del Banco Central consideró que la política monetaria es muy dura y mencionó un “sendero cauteloso de reacomodamiento”. Su impacto en el precio del dólar.
El presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, dijo que la tasa de interés real alta, del 10,9% si se descuenta la inflación, “permite avizorar un sendero cauteloso de reacomodamiento de la política monetaria”. En otras palabras, insistió, el “Banco Central considera que hay margen” para bajar el costo del dinero, en línea con la nueva meta de inflación del 15% que le impuso el Gobierno.
En conferencia de prensa, anticipó qué se puede esperar mañana, cuando el BCRA informe su tasa de política monetaria y mientras el mercado espera un nuevo recorte de unos 75 puntos básicos, en línea con el que definió la autoridad monetaria hace quince días.
La baja en la tasa de interés de referencia, actualmente en 28 por ciento, impacta en las inversiones en pesos y favorece la dolarización de carteras. Esa expectativa de inversiones en moneda nacional menos redituables impulsó al dólar, que hoy avanzó 13 centavos hasta los $ 19,42 promedio para la venta minorista.
El 28 de diciembre pasado, Sturzenegger y parte del Gabinete económico anunciaron el cambio en las metas de inflación y llevaron la de este año al 15%, desde el 12 por ciento máximo previsto anteriormente. Ese día, el titular del Central dijo que la nueva meta daba margen para relajar la política monetaria, aunque sería él quien definiera los tiempos. Los economistas, que preveían, en promedio, una inflación algo inferior a 17%, elevaron su estimación hasta un rango cercano al 20%.
Al presentar el Informe de Política Monetaria (IPOM), Sturzenegger comenzó con una suerte de mea culpa que parecía anticipar un endurecimiento en los pasos a seguir.
El titular del Banco Central dijo que en 2017 se registró una “baja muy fuerte de la inflación, aunque no se llegó a la meta”, de hasta 17 por ciento. El IPC avanzó 24,8%, desde un 36,6% registrado en 2016 en la medición nacional.
Según Sturzenegger, la diferencia entre la inflación y la meta fue culpa, principalmente, del Banco Central. “Fue un desvío que está en un 100 por ciento explicado por lo que ocurrió a principios de año”, cuando la autoridad monetaria avanzó con un “relajamiento de la política monetaria”. El BCRA bajó la tasa de interés y favoreció de esa manera la inflación, según la lectura oficial. Y lo hizo porque “en los regulados, los incrementos fueron superiores a los que habíamos anticipado”. Es decir, el Banco Central anticipó aumentos en las tarifas de energía y transporte inferiores a los que se llevaron adelante.
El IPOM abunda: “El primer factor que explica el desvío con respecto a la meta es una política monetaria que fue relajada entre octubre de 2016 y marzo de 2017, como respuesta a la menor inflación observada en la segunda mitad de 2016”, sostuvo el BCRA en el reporte. “El segundo factor fue un aumento de precios regulados por encima de lo estimado por el BCRA” en 2,1 por ciento, agregó.
¿Faltó coordinación entre el Gobierno y el Central para prever el impacto de los aumentos tarifarios? Como fuere, lo concreto es que, según Sturzenegger, ese “desvío” entre la inflación y la meta se corrigió cuando el Banco Central endureció su política monetaria con subas de tasas, a partir de mayo.
Sin embargo, Sturzenegger consideró que el contexto actual es destino y que el BCRA tiene margen para abaratar el costo del dinero y, de esa manera, impulsar la actividad económica, que comenzó a mostrar en noviembre ciertos signos de estancamiento.
Según el titular del Banco Central, el año 2017 comenzó con una tasa de interés real (es decir, descontada la inflación) del 3,9 por ciento. En cambio 2018 arranca con una tasa real considerablemente superior, del 10,5 por ciento. Dicho de otra forma: el Banco Central paga un interés anual más de 10 puntos superior a la inflación esperada.
Para Sturzenegger, “la tasa real es muy alta respecto del nivel en el que se ubicó la inflación núcleo”, que es el índice de precios descontados los servicios con valores regulados.
Según interpretó el economista Federico Furiase, de la consultora Eco Go, el Banco Central dio a entender que “le sobra tasa real esperada para la nueva meta” de inflación. ¿Lo que sigue? Una “baja gradual y en cuotas en la tasa de referencia”.