Diez inolvidables duelos entre argentinos y alemanes
A la mesa del fútbol le faltan condimentos si no se le ponen nombres propios. Por eso ahí están Dellacha, Helmunt Rahn, Corbatta, Uwe Seeler, Labruna, Berti Vogts, Sanfilippo, Rummenigge, Kempes, Matthäus, Caniggia, Klose, Batistuta, Ballack, Mascherano, Lehmann, Zanetti, Thomas Müller y Messi.
Por supuesto, Maradona y Beckenbauer. Todos, protagonistas de la misma historia. Polémicas, atropellos, jugadas inolvidables e injusticias se esconden detrás de los 22 partidos que han cruzado a argentinos con alemanes.
El domingo volverán a encontrarse, en el Maracaná, nada menos que un título habrá de por medio. Otra vez, por tercera vez, un registro sin antecedentes, para desempatar las finales en Mundiales.
Uno de los duelos más electrizantes que puede ofrecer el fútbol de hoy le regala pantallazos a la memoria. Cada partido es un capítulo. Y una y otra vez las emociones lograron desacreditar a la indiferencia.
Aquí, el repaso de diez clásicos históricos:
1.- La gloria del Azteca . La consagración de Diego Maradona. El mundo rendido a sus pies después de conducir a la Argentina a su segundo título de mundo, pero con el valor añadido de conseguirlo fuera del país. El conjunto dirigido por Carlos Bilardo superaba por 3 a 2 a la Alemania conducida por Beckenbauer, con sufrimiento, porque después de estar dos goles en ventaja, por conquistas de Brown y Valdano, los germanos empataron. La interminable corrida de Jorge Burruchaga desató el grito de gloria.
2.- La venganza del Olímpico. Cuatro años después, en Italia 90, Beckenbauer se desquitó y pudo darse el gusto de convertirse en campeón del mundo como futbolista y entrenador. La Argentina llegó herida y sin sustentos futbolísticos a la final, pero por siempre le quedará la excusa del penal que el juez mexicano Codesal le sirvió a los germanos para alzarse con la copa a través del remate de Brehme. El mágico Goycochea no pudo esa noche en Roma.
3.- El papelito del Lehmann. La ruta de los mundiales los volvió a encontrar, pero un par de estaciones antes, en los cuartos de final del Mundial que los alemanes organizaron en 2006. Aquel equipo de Pekerman estuvo a 12 minutos de eliminar a los anfitriones, porque ganaba con un cabezazo de Ayala. Pero empataron, y en los panales se lució Jens Lehmann con su célebre papelito en la media. Messi siguió todo desde el banco en el Olímpico de Berlín.
4.- Papelón en Ciudad del Cabo. Hace cuatro años también se cruzaron argentinos y alemanes, que ahora reeditarán el duelo por tercer Mundial consecutivo. En suelo africano, otra vez fue por los cuartos de final y la Argentina de Maradona sufrió una vergonzosa eliminación. La falta de planificación del cuerpo técnico quedó a la vista ante un seleccionado alemán, ya con Neur, Müller, Özil y la conducción de Loew, marcado para dejar una huella en estos tiempos.
5.- Una alegría para Basile . Se despedía 1993 y la selección del Coco, en alza tras ganar la Copa América, se preparaba para el Mundial de los Estados Unidos. Qué mejor que probarse con el campeón del mundo vigente. en un amistoso en el Orange Bowl, de Miami. La Argentina se impuso por 2 a 1, con goles de Hernán Díaz y Abel Balbo. Esa tarde, todavía sin Maradona suspendido por doping, Ariel Ortega reemplazaba a Medina Bello en el último minuto y debutaba en la selección.
6.- Bielsa los quería juntar. En abril de 2002 probablemente la Argentina era la mejor selección del mundo y preparaba ese favoritismo para desembarcar en la Copa de Corea-Japón. Bielsa se reservaba algunos últimos ensayos, y el más trascedente era volver a juntar a Caniggia con Batistuta. Pero Bati se lesionó tres días antes del partido y el Pájaro la jornada anterior. La prueba voló por los aires. La Argentina igual ganó, 1 a 0, con gol de Sorin, en Stuttgart. Entre los alemanes ya había un tanque goleador de apellido… Klose.
7.- La primera advertencia. La Argentina no participaba de un Mundial desde 1934, pero concurrió a Suecia 58 con la certeza de que sería campeona del mundo. La historia recuerda el sonoro cachetazo 1-6 con el que Checoslovaquia que la eyectó del torneo, pero antes, el día de su debut, ya recibió un golpe: Alemania Federal le ganó 3 a 1 y empezó a ubicar a la selección en una cruel realidad. La delantera albiceleste la integraron Corbatta, Prado, Menéndez, Alfredo Rojas y Cruz, y en el banco quedaron Infante, Labruna, Sanfilippo…
8.- La otra cara de la moneda. La Argentina no atravesaba un buen momento, llegaba de perder con México un amistoso y en el último Mundial, el de 1970, ni había participado. Pero en 1973 la selección derrotó en Munich por 3 a 2 a los germanos, que contaban con Maier, Vogts, Beckenbauer, Breitner, Overath…, y que un año después le ganarían a la Naranja Mecánica la final del Mundo. Se arrancó 3-0 y se terminó sufriendo, pero fue el primer triunfo ante Alemania como visitante. Ghiso, el Beto Alonso y Brindisi, los goles de esa formación dirigida por Sívori.
9.- Alarmas en la Bombonera. Las inolvidables series internacionales previas a la Copa del Mundo de 1978 trajeron a Buenos Aires el año anterior a Alemania. Aquel equipo de Menotti todavía contaba con Gatti, Pernía y Carrascosa en la formación. Con dos goles de Fischer y otro de Holzenbein, la Alemania Federal de Helmut Schön frenó el triunfalismo albiceleste. Passarella penas descontó.
10.- A toda orquesta con Bilardo. Eran los comienzos de Carlos Bilardo como entrenador y un triunfazo en Düsseldorf le abrió el crédito. En 1984 la Argentina superó con mucha autoridad y un juego atractivo por 3 a 1 a Alemania, con dos goles del Bocha Ponce y otro de Falkenmayer, en contra. Aquel partido se recuerda hasta hoy porque Bochini dibujó una genialidad: pateó desde media cancha y al arquero Harald Schumacher volvió sobre sus pasos, voló hacia atrás y alcanzó a despejar lo que hubiese sido un golazo.