Comenzaron a juzgar a 18 represores por delitos contra casi 500 víctimas en la dictadura
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata comenzó hoy a juzgar a 18 represores, entre ellos a Miguel Etchecolatz y el exmédico policial Jorge Berges por las torturas, homicidios y ocultamiento de menores en perjuicio de casi 500 víctimas alojadas en tres centros clandestinos de detención durante la última dictadura militar, entre ellos los adolescentes secuestrados en La Noche de los Lápices.
Se trata de los delitos cometidos en los centros clandestinos conocidos como el “Pozo de Banfield”, el “Pozo de Quilmes” y “El Infierno”, que estaba ubicado en la Brigada de Lanús.
El juicio que unificó los crímenes de lesa humanidad cometidos en los tres centros comenzó pasadas las 10.30, por videoconferencia debido al aislamiento social y obligatorio dispuesto ante la pandemia de coronavirus; y en esta primera audiencia se leyeron las respectivas requisitorias de elevación a juicio por cada centro clandestino.
Para garantizar el carácter público del mismo se transmitió por el canal del Centro de Información Judicial (CIJ) y también el canal de Youtube de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM).
El TOF 1, integrado por Walter Venditti, Esteban Rodríguez Eggers y Ricardo Basilico, comenzó a juzgar por los delitos cometidos en el Pozo de Banfield y el Pozo de Quilmes al exministro de Gobierno bonaerense durante la dictadura, Jaime Smart; al exdirector de Investigaciones de la Policía bonaerense, Miguel Etchecolatz; el exmédico policial Jorge Antonio Berges; Federico Minicucci; Carlos Maria Romero Pavón, Roberto Balmaceda y Jorge Di Pasquale.
También empezó a juzgar a Guillermo Domínguez Matheu; Ricardo Fernández; Carlos Fontana; Emilio Herrero Anzorena; Carlos Hidalgo Garzón; Antonio Simón; Enrique Barré; Eduardo Samuel de Lío y Alberto Condiotti.
Por los crímenes de lesa humanidad cometidos en el centro conocido como “El Infierno” también están imputados Etchecolatz, Berges y Smart y el ex policía Miguel Angel Ferreyro.
En esta primera audiencia, y mientras se leían las requisitorias, los imputados siguieron la lectura en los domicilios donde la mayoría cumple arresto domiciliario; excepto Miguel Etchecolatz y Jorge Di Pasquale que están en prisión.
El Ministerio Público Fiscal estuvo representado por los fiscales Hernán Shapiro, Gonzalo Miranda y Juan Martín Nogueira.
En el Pozo de Banfield y Quilmes, dos de los centros clandestinos de detención más grandes que funcionaron en la provincia de Buenos Aires, se juzgarán los delitos sufridos por 429 víctimas y se prevé que declaren unos 400 testigos.
Los 17 imputados están acusados de privación ilegal de la libertad, aplicación de tormentos, homicidio calificado, abuso sexual con acceso carnal y sustracción, retención y ocultamiento de menores.