Claromecó: renunció un funcionario por el arribo de un joven desde Brasil para hacer la cuarentena
Un funcionario de la Municipalidad de Claromecó, en el partido bonaerense de Tres Arroyos, renunció tras el arribo de un joven proveniente de Brasil para hacer la cuarentena en esa localidad bonaerense, donde tiene su domicilio, lo que derivó en una protesta de vecinos por su presencia, informaron hoy fuentes comunales.
Todo comenzó cuando el joven, que es hijo del fiscal de Tres Arroyos, Carlos Lemble, ingresó al balneario proveniente de Brasil con el fin de llevar a cabo la cuarentena obligatoria.
El delegado del Ente Descentralizado de Servicios Turísticos de Claromecó, Carlos Avila, intentó evitar el ingreso del joven debido a que días antes la localidad se encontraba bloqueada en el marco del aislamiento obligatorio.
Fuentes comunales indicaron hoy que, “pese a que el muchacho contaba con un permiso otorgado por Migraciones y con domicilio en Claromecó, el funcionario decidió renunciar a su cargo”.
“Fue allí cuando los vecinos, al tomar conocimiento de la decisión de Avila, salieron a las calles, pese al aislamiento, para protestar por la presencia del muchacho”, agregaron las fuentes.
Tras lo ocurrido, el joven dejó la vivienda, abordó una camioneta y se trasladó a Tres Arroyos, ciudad en la que permanecerá en aislamiento, explicaron.
“Nosotros tenemos mucho contacto con comerciantes y gente del pueblo, ya habíamos visto otros casos de personas que no eran de Claromecó. Era un pedido que me había hecho la gente para que no entre nadie más al pueblo”, sostuvo Avila en declaraciones a la Voz del Pueblo de Tres Arroyos.
El ex funcionario explicó que él se había comprometido a eso y que, “al ver que entró gente” a la localidad, sintió que “había fallado, y feo”, por lo que decidió renunciar.
Por su parte, el fiscal Lemble expresó: “Mi hijo tiene autorización de ingreso al país bajo el sistema de repatriación programada”.
Además indicó que la obligación legal del joven es “guardar cuarentena en su domicilio por 15 días”.
“Pero ganaron los violentos y no pudo quedarse”, expresó Lemble.
El funcionario judicial señaló que su hijo “hace tres años que vive en Claromecó” y relató que el joven se desempeña en desarrollo de software y estuvo en Brasil porque “se iba a trabajar tres meses” pero “se vino en cuanto pudo pasar y volver a su casa donde vive cuando está acá”.