Científicos prueban crear mosquitos inmunes al virus del dengue
Un equipo de científicos de Estados Unidos, Australia y Taiwan logró crear mosquitos inmunes al virus del dengue, tras insertar el gen de un anticuerpo humano en el genoma de mosquitos Aedes aegypti y bloquear así su capacidad de actuar como vector, aunque la aplicación práctica de esta estrategia deberá ser confirmada por estudios de campo, informó hoy una publicación científica.
“De ser efectiva, la estrategia contribuiría a reducir de manera significativa la prevalencia del dengue a nivel mundial”, remarcó la viróloga molecular y científica del Conicet, Luana de Borba, describió la Agencia de Noticias Científicas del Instituto Leloir.
Esta fue la primera vez que un grupo de científicos logra crear mosquitos genéticamente modificados inmunes al virus del dengue, que no tendrían la capacidad de transmitirlo a los humanos.
Incluso, podría transformarse en una herramienta útil contra esta enfermedad viral endémica que afecta a más de 100 países y causa 400 millones de infecciones cada año, explicó el reporte.
En 2013, investigadores de la Universidad de Vanderbilt, en Estados Unidos, estudiaron la sangre de una persona que había sido infectada con dengue varias veces y detectaron un anticuerpo que podía unirse a los cuatro serotipos de dengue y evitar que infecten nuevas células.
Ahora, la revista “PLoS Pathogens” publicó un trabajo liderado por Omar Akbari, doctor en biología celular y molecular de la Universidad de California, en San Diego, Estados Unidos, que describe el desarrollo de una variante de mosquitos Aedes aegypti que posee el gen de ese anticuerpo de origen humano insertado en su genoma.
“A diferencia de los humanos, los mosquitos no producen naturalmente anticuerpos contra los agentes patógenos. Pero los científicos lograron darle esa capacidad a un grupo de Aedes aegypti”, explicó De Borba y resumió que es como si los hubieran “vacunado”.
Lo que Akbari y su equipo hicieron fue rediseñar el gen del anticuerpo antidengue humano para simplificar su estructura, y luego lo insertaron en el genoma de los mosquitos.
Al alimentar mosquitos con sangre infectada con los cuatro serotipos de dengue se comprobó que ninguno de ellos tenía niveles detectables del virus en su saliva, el medio a través del cual lo transmiten a la sangre humana tras una picadura.
Todavía no se desarrolló una vacuna efectiva contra el dengue y algunas de las medidas que se emplean para frenar su transmisión son la eliminación de criaderos del mosquito Aedes aegypti, su control a través del empleo de insecticidas y la utilización de mosquiteros, aunque ninguna logra su erradicación.
Para Gamarnik, el estudio liderado por Akbari “es un primer paso alentador donde se emplea una estrategia novedosa para el control de las infecciones por dengue”.