Christophe Krywonis contó cómo se siente tras realizarse una manga gástrica y bajar 25 kilos
Cuando Christophe Krywonis superó los 135 kilos, supo que “algo” tenía que hacer para mejorar su vida. Cuando su salud estuvo en riesgo, decidió abordar su condición con asistencia médica.
Así es que el francés se recluyó en un spa de Córdoba, hizo psicoterapia, dieta estricta, ejercicios, con los que adelgazó los primeros 9 kilogramos y -en febrero- pasó por el quirófano para realizarse una manga gástrica, práctica que describió en diálogo con la revista Paparazzi: “Produce un achicamiento del estómago, lo cortan y lo cosen. Según los cirujanos, no era necesario un bypass gástrico por mi vida y mi condición física. No soy consumidor de alcohol, no fumo ni me drogo. Tengo una vida normal”.
Ya recuperado, logró adelgazar un total de 25 kilos. De visita en “Morfi”, explicó cuál fue el detonante para tomar la decisión de operarse: “Fue cuando supe que tenía diabetes, en mayo del año pasado, con un pico muy alto. Y me asusté. Porque la diabetes es una muerte silenciosa, que te agarra y no te das cuenta, podés perder la vista, duelen los riñones y en los casos extremos algunos son amputados. Eso me asustó, hace años que venía postergándolo”.
Conforme con los resultados, comentó: “Lo más importante no está a la vista, está todo en lo mental. Después de la operación te sentís mucho mejor, te vuelve el buen humor, las ganas de hacer las cosas mejor todavía”. Así es que cuando el Chino Leunis le comentó que pronto podría volver a esquiar, una de sus pasiones, Krywonis aclaró. “Tengo un trabajo más importante que es la musculación, porque cuando uno adelgaza pierde grasa y músculo, todo. Entonces, el doctor que me operó me dijo que haga deporte”.
Al final, Christophe Krywonis anticipó su regreso a la televisión con un nuevo reality de cocina (N. de la r: este 2019 llega la segunda temporada de Bake Off): “Hoy en día puedo probar de todo, pero en una cantidad muy leve. Ya sé que en un mes voy a poder probar varias tortas si es necesario, ja, ja”. (Ciudad Magazine)