Carlos Fayt: "Sí, sigo todavía"
El juez decano de la Corte Suprema negó que vaya a dejar su cargo; al ser consultado sobre si se pondría una fecha límite, respondió: “Déjeme pensarlo todavía”.
El juez de la Corte Suprema de Justicia Carlos Fayt ratificó que continuará en el cargo y evitó dar una definición sobre plazos para dejar el máximo tribunal, en momentos en que se incrementa la polémica por la renuncia de Eugenio Zaffaroni y el fallecimiento de Enrique Petracchi .
“Sí, sigo todavía”, respondió Fayt, de 96 años, al ser consultado en una entrevista con radio Del Platasobre su permanencia.
Al igual que Elena Highton de Nolasco, el juez consideró que sería “deseable” que la Corte continúe funcionando con cinco miembros. “No nos hemos reunido para resolverlo, si necesitamos uno nuevo o no. Esperaremos a ver que dice el Gobierno. Sería deseable mantener los cinco miembros”, señaló el ministro, que fue declarado ayer “Personalidad Destacada en el ámbito de las Ciencias Jurídicas” por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires.
Fayt enfrenta desde hace tiempo una dura embestida del Gobierno. “Es absurdo pensar que una persona a los 96 años pueda cumplir sus funciones laborales como juez de la Corte”, afirmó días atrás el diputado kirchnerista Carlos Kunkel .
Zaffaroni, cumpliendo con su anuncio de renunciar al cumplir 75 años, presentó el viernes pasado su dimisión en una carta dirigida a Cristina Kirchner . De esta forma, la Presidenta podrá designar a un reemplazante antes de que termine su segundo mandato, ya que el máximo tribunal quedaráconformado por cuatro integrantes, uno menos que el límite que fija la ley 26.183, que fue sancionada por el Congreso en noviembre de 2006. La oposición rechaza esa posibilidad y pide que el próximo gobierno sea el que cubra la vacante.
A pesar de que supera el límite de 75 años que estableció la reforma constitucional de 1994, Fayt puede seguir en la Corte ya que fue nombrado con anterioridad a que se fijara ese tope. Al ser consultado en la entrevista radial sobre si pensó en una fecha para jubilarse, el juez respondió: “Déjeme pensarlo todavía”.