Bolsonaro puso en duda que Rousseff haya sido torturada durante la dictadura
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, puso en duda este lunes que la dictadura militar haya torturado a la exmandataria Dilma Rousseff durante su prisión política de casi tres años por haber sido una activista contra el régimen de facto (1964-1985).
“Dicen que Dilma fue torturada y que le fracturaron la mandíbula. Espero todavía la radiografía para ver si eso ocurrió. Hasta el día de hoy estoy esperando la radiografía”, afirmó Bolsonaro sobre la expresidenta, del opositor Partido de los Trabajadores, que gobernó entre 2011 y 2016, cuando fue destituida en un juicio político.
Bolsonaro, quien reivindica la dictadura y defendió la tortura contra presos políticos, en el juicio de destitución de Rousseff votó homenajeando al excoronel Carlos Alberto Brilhante Ustra, a quien calificó como “el pavor” de la mandataria.
Es que Ustra era el jefe de la policía política del régimen y bajo su mando Rousseff fue torturada durante 22 días seguidos en San Pablo, luego de haber sido miembro de grupos de resistencia como Var-Palmares a la dictadura militar.
En 2014, militares que hoy integran el Gobierno de Bolsonaro reaccionaron contra la mandataria por haber creado la Comisión de la Verdad, un organismo para recopilar crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura que no fueron juzgados a raíz de la Ley de Amnistía de 1979 todavía en vigor.
Incluso el vicepresidente Hamilton Mourao, un general retirado, dejó el Ejército luego de que Rousseff presentara el documento de la Comisión de la Verdad, violando la cadena de mando y criticando de manera pública a la entonces jefa del Estado.
Bolsonaro, en diálogo con seguidores en la puerta del Palacio de la Alvorada, hizo bromas respecto a las torturas contra Rousseff, quien estuvo casi tres años detenida, de enero de 1970 hasta diciembre de 1972.
Sin mostrar pruebas, dijo que el fallecido segundo exmarido de Rousseff, Carlos Araújo, robaba camiones con ella en Río de Janeiro.
También recordó a Claudio Galeno, primer marido de Rousseff, que partió al exilio. “Galeno fue a un país democrático, llamado Cuba”, dijo el excapitán ultraderechista ante la risa de sus interlocutores.
La semana pasada Bolsonaro había dicho que la dictadura “trataba con dignidad a los terroristas detenidos” y recomendó leer el libro sobre la dictadura escrito por el fallecido coronel Ustra.