Benedicto XVI se prepara para la muerte: “Mis fuerzas se desvanecen”
Lo dijo el expontífice en una carta al diario italiano Corriere della Sera.
El papa emérito Benedicto XVI, que cumplirá 91 años en abril, se prepara para su “último viaje“, según relató en una carta publicada hoy por el diario italiano Corriere della Sera.
“Me conmovió que tantos de sus lectores quieran saber cómo estoy pasando la última etapa de mi vida“, escribió el ex pontífice alemán al diario, que le había informado de la preocupación de numerosos lectores sobre su estado de salud.
“Lo único que puedo a decir es que mis fuerzas físicas se desvanencen lentamente, estoy en un peregrinaje interior hacia la Casa” del Señor, explicó Joseph Ratzinger.
“En este último tramo que a veces es un poco extenuante, para mí es una gran bendición estar rodeado de tanto amor y bondad, como nunca habría imaginado”, añadió el alemán.
Desde su revolucionaria renuncia en febrero de 2013 –la primera en más de 700 años-, en medio de acusaciones de nepotismo y corrupción en la burocracia vaticana, Benedicto XVI vive en un pequeño monasterio en el Vaticano en compañía de cuatro religiosas y de su secretario personal Georg Gänswein.
Este último anunció hace dos años que el papa emérito se estaba “apagando como una vela, lenta y serenamente”.
Celebra la misa todos los días, reza mucho, recibe visitas dosificadas y responde a un voluminoso correo. Además, mirá los noticieros y recibe varios diarios católicos así como publicaciones de teología.
“Ya no controla sus manos, no puede tocar el piano, ve muy mal, pero tiene una lucidez perfecta, se acuerda de todo”, describió el año pasado un alto prelado del Vaticano. Su sucesor, el papa Francisco, a menudo le rinde tributo.