jueves, noviembre 21, 2024
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Argentina investigará una "estafa" de buitres para cobrar los seguros

La Comisión Nacional de Valores requerirá información a su par de los Estados Unidos. El Miniesterio de Economía plantea que el cobro del seguro de default sería una maniobra impulsada por los propios holdouts con la complicidad del juez de Nueva York. A esta escándalo se suma que el fondo NML integra la entidad que aprobó el pago de ese beneficio. Duras críticas del Nobel Joseph Stiglitz.

 La Argentina dio ayer un paso clave para tratar de demostrar que el juez de Nueva York, Thomas Griesa benefició, por acción u omisión a los Fondos Buitres o litigantes, en detrimento de la otra parte, denominada como la República. El gobierno empieza a jugar en un tablero de ajedrez en el que se entremezclan condimentos jurídicos, políticos e internacionales. Ayer, el Ministerio de Economía, a cargo de Axel Kicillof decidió avanzar con un pedido a la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC) sobre las transacciones de los títulos atados a los seguros por default, con la intención de saber si los fondos buitre –por sí mismos o a través de terceros– evitaron alcanzar un acuerdo con la Argentina para obtener un doble beneficio. “Ante esta posible estafa millonaria, el Ministerio de Economía ha notificado a la Comisión Nacional de Valores esta situación y ha solicitado que, de inmediato, se inicie una exhaustiva investigación que determine si este juicio no es en realidad la fachada de una maniobra especulativa en favor de los fondos buitre, que pretende que ganen por los bonos en default que compraron a precio vil, pero también por los derivados financieros que se cobran cuando esta sociedad ISDA lo decide”, sostuvo el Ministerio de Economía a través de un comunicado que tiene más de una carilla.

Esto se disparó porque ayer se conoció que la sociedad privada ISDA (Asociación Internacional de Swaps y Derivados), en la que participan los mismos fondos buitre (ver nota aparte), dio lugar al pago de los seguros de default por un monto cercano a los U$S 1000 millones.

Aunque esto no implica que la República deba pagar absolutamente nada, ya que son transacciones entre privados, favorece a unos privados a expensas de otros en intenta instalar el mensaje que Argentina se encuentra en default.

Luego de una nueva audiencia en la que el juez Thomas Griesa no definió nada y atacó directamente a funcionarios argentinos, desde el gobierno sostuvieron que “su actitud, lejos de impartir justicia y generar condiciones equilibradas entre las partes, busca favorecer a los fondos buitre”. Esta reacción oficial tiene un fundamento lógico. ¿Cuál puede ser el interés de NML Capital, el fondo buitre que está en litigio con la Argentina, de alcanzar un acuerdo sí evitando una solución negociada obtienen un triple beneficio? Por un lado cobran el juicio que Griesa les otorgó pero paralemente se hacen con el dinero del seguro de default y apuestan al negocio de los derivados que también decide la Asociación Internacional de Swaps y Derivados, organización que ellos integran. Por esto, la Argentina se pregunta cómo puede ser que el juez Griesa haya delegado en los holdouts la decisión de dar un stay, cuando son estos mismos los que podían tener ganancias millonarias si no arreglaban.

“Lo más grave es que ya no estaríamos ante la conocida figura de ‘utilización de información privilegiada para favorecerse’, figura condenada internacionalmente por todos los organismos de contralor, sino que estaríamos ante un insólito caso donde una de las partes, con la ayuda del juez, provoca los hechos que luego la favorece”, resalta el informe de Economía.

Con la falta de pronunciamiento en la audiencia de ayer, en el gobierno interpretan que, lejos de mantener el status quo, como lo reclamó la República, el juez de Nueva York favorece a los fondos buitre porque crea las condiciones para que los holdouts obtengan pingues ganancias de esta maniobra.

AUDIENCIA. En este contexto, marcado por la desconfianza de la Argentina con el juez, Thomas Griesa alimentó de alguna manera el malestar del gobierno nacional. Pasadas las 11 de la mañana en Manhattan (12 de la Argentina), Griesa se hizo presente en el tribunal repleto de gente e hizo uso de la palabra en un monólogo que ocupó los primeros 40 minutos del encuentro. Con el período de gracia vencido se esperaba que el juez diera alguna opinión sobre lo que se debía hacer con los fondos bloqueados en las cuentas del Bank of New York Mellon (BoNY), pero evitó pronunciarse sobre el tema. Griesa se encargó de criticar los discursos de los funcionarios del gobierno argentino y a defender al mediador Daniel Pollack. El magistrado, que se supone como un intérprete objetivo de la norma y equidistante de las partes, se dedicó a atacar a la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, una de las partes den disputa.

“Tome pasos para dejar de difundir información engañosa. Las verdades a medias no son lo mismo que la verdad”, indicó el magistrado además al dirigirse al abogado de la Argentina, Jonathan Blackman, del estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H), en clara alusión a los dichos de Kicillof y Cristina del día anterior.Todo ello pese a que Blackman recalcó que la Argentina está dispuesta a continuar el diálogo y coincidió con la idea de que un acuerdo es la “única solución”, pero que debe ser una “solución global”, que respete los intereses de todos los bonistas.

En la audiencia también hizo uso de la palabra el abogado del fondo buitre NML, Robert Cohen, para avalar la decisión del juez sobre la continuidad de las negociaciones y del special master asignado.

En la sala estuvieron presentes además letrados de las instituciones financieras como el Bank of New York (BoNY), que en este encuentro, tampoco logró una respuesta por parte del juez respecto a la transferencia realizada por Argentina el 26 de junio.

Lo mismo le ocurió a la representante del J.P. Morgan, que logró que toda la audiencia –ya de pie y a punto de partir de la sala– regresara a sus asientos para solicitar en menos de un minuto, una aclaración sobre la orden que habilitó pagos a otros agentes y que no comprendió a esa entidad.

Con las agujas del gran reloj –que cuelga a un costado de la puerta de ingreso– marcando las 12 del mediodía (las 13 en Argentina), Griesa dejó en suspenso su respuesta y le pidió a la abogada del JP Morgan que se ponga en contacto con su oficina el próximo lunes para seguir con el planteo de su requerimiento. Quedan muchos puntos grises por aclarar. Por ejemplo, porque Griesa es tan rígido con la Argentina y, sin embargo, nada dijo de la maniobra del fondo buitre NML Capital, que, a toda costa, evitó alcanzar un acuerdo con la Argentina antes de que se vencieran los plazos y ahora cobrará los seguros contra default gracias a un jurado que se encarga de definir si la Argentina entró en default, con un dato curioso ellos integran este comité selecto pero también tienen los seguros contra default. Ahora, Griesa también deberá responder.

Bonistas italianos presionan al Bank of New York

El abogado y asesor de los bonistas italianos que entraron al canje de deuda argentino, Tullio Zembo, reiteró que los fondos depositados no pueden seguir siendo retenidos por el Banco de Nueva York sin una orden legal que lo obligue, debido a que ya no son de la Argentina.

En declaraciones televisivas, el letrado, representante de 450.000 bonistas italianos reestructurados, aseguró que “es responsabilidad” del Banco de Nueva York el pago a sus clientes”.

“Él (el Banco de Nueva York) tiene que pagar ya a menos que haya una órden específica precisa de un juez competente que lo obligue a no pagar, ya que esa plata no es de disponibilidad de Argentina, sino que es de disponibilidad de los acreedores”, explicó.

Para Zembo, “el hecho de que Argentina haya pagado no completa el ciclo. El acreedor tiene que cobrar. La obligación del banco de Nueva York es pagar”.

La entidad financiera decidió mantener el dinero congelado en sus cuentas del Banco Central hasta tener mayores indicaciones por parte del juez Thomas Griesa. Los U$S 536 millones fueron girados por el gobierno nacional el pasado 26 de junio y ya fueron razón de varias presentaciones legales. De hecho, bonistas europeos denunciaron al BoNY en la justicia belga para obtener un fallo contrario a lo dicho por los tribuanles de EE UU.

“El swap con China no está en riesgo”

“El swap con China no corre riesgos, porque se pensó evaluando estas situaciones. Los mismo se dijo sobre el financiamiento de obras de la represa Kirchner y Cepernic”, sostuvo el viceministro de Economía, Emmanuel Álvarez Agis.

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