André, hijo de Celeste Cid y Emmanuel Horvilleur, futura promesa del fútbol
Celeste Cid reveló un dato hasta ahora desconocido sobre su hijo André, de 11 años, que tuvo con Emmanuel Horvilleur.
En una entrevista con la revista Luz, la actriz contó la pasión de él por el fútbol, y que incluso tuvo la posibilidad de empezar a hacerlo de modo profesional, y que ella prefirió no acceder a que trabaje.
“Se fue a probar como jugador de Vélez y quedó elegido. Fue todo un tema. En principio porque no me gusta que a su edad empiece a ver al futbol como una obligación o una carrera… Lo veo tan feliz así, jugando por placer, que me da cosa… Por otro lado, la verdad es que prefiero que primero termine bien el colegio. Yo en su momento tuve que dejar el secundario y lo lamenté muchas veces”, comento.
Además habló, como siempre, de su pasado más “oscuro”, como ella lo definió. “Yo nunca fui de la noche. Mi periodo más oscuro, por así decirlo, tuvo que ver más con una crisis de identidad que con la idea de descontrol o reviente. Siempre me pareció un bajón eso. Es más, te diría que recién ahora estoy descubriendo la noche pero desde otro lugar: es el momento en que mi hijo se duerme y me pongo a pensar en una rica cena con mi novio o una amiga o en el libro que dejé pendiente. Leer es una de las cosas que más me gustan en la vida”, aseguró.
“Estoy convencida de que ya no repetiré ciertos errores del pasado. Hoy me siento feliz y parada desde otro lugar en la vida, consciente de que hay cosas propias de los 20 que si ñas volvés a hacer a los 30 te transformás en una auténtica pelotuda”, sentenció.
Sobre su relación con el dinero, Cid contò que es “austera”. “En lo que más gasto es en plantas, flores y semillas. No me interesan los diamantes ni los grandes lujos. Y libros y quizás algún viaje. Soy feliz con muy poco”, puntualizó, y contño una divertida anécdota: ¡le pide prestado a André!
“Él también tiene esa conducta austera. Es hasta más ahorrativo que yo. A esta edad muchos de sus regalos son sobres con plata y èl los guarda con mucha prolijidad. No sé si debería decirlo, pero en más de una oportunidad ¡le tengo que pedir plata prestada! (risas). Y me la presta, pero enseguida me pregunta cuando se lo devuelvo“, relató. ¡Menos mal que no arrancó como jugador profesional!