Michetti, investigada por la Justicia y peleada con algunos senadores
LA DECISIÓN DEL FISCAL FEDERAL GUILLERMO MARIJUAN DE PEDIR QUE SE ABRA UNA INVESTIGACIÓN SOBRE EL ORIGEN DEL DINERO ROBADO DE SU CASA, CERRÓ UNA SEMANA COMPLICADA PARA LA PRESIDENTA DEL SENADO ADEMÁS MANTUVO UNA FUERTE DISCUSIÓN CON ALGUNOS LEGISLADORES ACERCA DE SU IMPOSIBILIDAD DE HACER USO DE LA PALABRA DURANTE LAS SESIONES.
En el mediodía del viernes, el fiscal le entregó al juez Ariel Lijo un escrito a favor de abrir la investigación a partir de la denuncia de un abogado, Leonardo Martínez Herrero; a la que se acumuló otra de los diputados nacionales kirchneristas Juan Cabandié y Rodolfo Tailhade.
En las denuncias se pidió investigar si la vicepresidenta incurrió en algún delito en torno al dinero (245 mil pesos y 50 mil dólares) robado de su casa el 22 de noviembre de 2015.
Por el robo fue procesado un custodio de la Vicepresidenta.
Y también establecer si el dinero estaba declarado y corroborar si 200 mil pesos provinieron de una donación recibida por la fundación SUMA, presidida por la funcionaria, como ella explicó.
La imputación de la fiscalía cierra una semana en la que la vicepresidenta, además, se peleó con la mayoría de los senadores presentes durante la sesión del último miércoles, ante quienes argumentaba que podía hacer uso de la palabra, cuando el Reglamento, en realidad, se lo prohíbe.
“Ustedes me pidieron la posibilidad de flexibilizar. Me parece que pueden escuchar dos minutos lo que yo puedo pensar”, argumentó Michetti, mientras que los legisladores, sobre todo el presidente de la bancada del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, le respondía que el Reglamento de la cámara alta le impide al Presidente del cuerpo tomar parte en los debates.
La última vez que un vicepresidente hizo uso de la palabra durante la discusión de una norma fue en julio de 2008, cuando el mendocino Julio Cobos fundamentó su voto “no positivo” a la ley que ponía en marcha la Resolución 125 sobre retenciones agropecuarias.
De hecho, el ex vicepresidente Amado Boudou nunca respondió cuando la oposición, en reiteradas sesiones, le pedía abiertamente en el recinto que deje la Presidencia de la Cámara por sus procesamientos judiciales.
“Este proyecto tiene una implicancia presupuestaria enorme. Porque es un tren desde Constitución hasta Bariloche y hasta Zapala. No estamos hablando de una pavada”, arrancó Michetti argumentando en contra de una iniciativa impulsada por la rionegrina de la Coalición Cívica-ARI, Magdalena Odarda, para poner en marcha tres nuevos ramales ferroviarios que finalmente fue aprobada y enviada a Diputados gracias a los votos de la centroizquierda y del peronismo.
Cuando la presidenta empezó a hablar, Pichetto, que no estaba presente en el recinto porque tenía un problema de salud, regresó para cortarla diciéndole que “no debería hablar”.
“Ya sé que no puedo hablar pero, ¿sabe qué?, hay una confusión”, argumentó Michetti, a lo que Pichetto volvió a enfatizar que “el Reglamento es estricto en ese sentido: usted no es senadora”.
Luego, Pichetto se quejó de que en el recinto no funcionaba el tablero de votación y de que “no anda nada”. Michetti le pidió tranquilidad, a lo que el rionegrino le volvió a decir que la vicepresidenta tampoco le podía contestar.
“¡Le voy a contestar porque soy una persona!”, levantó el tono Michetti.
El radical Angel Rozas, presidente del Interbloque Cambiemos, terció en la discusión indicando que la presidenta no podía participar del debate, tal como lo indica el artículo 33 del Reglamento de la Cámara, pero también le advirtió a Pichetto que modifique el tono con el que se refería a la vicepresidenta.
Finalmente, el legislador rionegrino, más calmo, le pidió disculpas a Michetti argumentando que no se trataba de “una cuestión de tipo personal”.
“Coincido en aquello de que el silencio de la presidenta en forma permanente es lo más sano para el funcionamiento de esta Cámara en tanto el Reglamento así lo impone”, cerró la discusión el cordobés Ernesto Martínez, senador por el Frente Cívico de Córdoba, que integra el Interbloque PRO.
Sin embargo, luego de que terminó la sesión, cerca de las 20, fuentes parlamentarias indicaron que la vicepresidenta se cruzó en una discusión con algunas senadoras de la oposición a las que les enrostró no haber participado de la discusión con Pichetto para defenderla por su condición de mujer.(Agencia Télam)