Rosario: son más de diez las viviendas afectadas por la explosión del laboratorio
GONZALO RATNER, SUBDIRECTOR DE DEFENSA CIVIL DE ROSARIO, DETALLÓ QUE LA EXPLOSIÓN DEL LUNES DE UN LABORATORIO QUE FABRICABA SUERO FISIOLÓGICO, “LIBERÓ UNA ENERGÍA MUY GRANDE” Y AFECTÓ A MÁS DE 10 VIVIENDAS.
El subdirector de Defensa Civil de Rosario, Gonzalo Ratner, informó hoy que son más de diez las viviendas que ayer resultaron afectadas por la explosión de un laboratorio que fabricaba suero fisiológico, que dejó cinco personas heridas.
De todas formas “no hay ningún riesgo de derrumbe, salvo en la edificación que ya había sufrido el derrumbe parcial y será demolida”, confirmó Ratner.
La explosión “liberó una energía muy grande. Se encontraron a 50 y 60 metros a la redonda objetos volados arriba de los árboles y los techos”, detalló el funcionario.
Asimismo, señaló que el hombre internado con quemaduras tiene “diagnóstico delicado, está estable, pero su cuadro es de mucho cuidado”, y aseguró que la zona del siniestro “ha vuelto casi a la normalidad, en cuanto a la circulación y a los servicios, más allá de grietas en algunas viviendas, pero no hay peligro y están habitadas”.
Por su parte, la concejala Fernanda Gigliani denunció que la habilitación del Laboratorio Apolo “había vencido el 9 de diciembre de 2011”.
“En las últimas horas el subsecretario de Control y Convivencia de la Municipalidad, Guillermo Turrín, indicó que se realizaron unas 20 inspecciones en el Laboratorio”, señaló Gigliani, y se preguntó: “¿Cómo es posible que se realicen inspecciones en un lugar que no cuenta con habilitación municipal?”.
“Este tipo de cuestiones se resuelve mostrando el expediente de habilitación, mostrándolo públicamente para saldar todas estas dudas. De lo contrario estamos ante un hecho de alta gravedad”, consideró la concejala.
La explosión en la que cinco personas resultaron heridas se produjo el lunes alrededor de las 5 en la zona sur de Rosario y estuvo seguida por el derrumbe de las instalaciones del laboratorio “Apolo” y de una vivienda lindera.
Fuente: Télam