AUTÓDROMO HERMANOS EMILIOZZZI
AUTÓDROMO HERMANOS EMILIOZZZI
Olavarría, Buenos Aires
El Club Atlético Estudiantes fue el primero en desatar la pasión por el automovilismo en Olavarría con las dos grandes carreras de 1937 y 1938, en la que hoy es la Autopista Luciano Fortabat. Sin embargo, las discrepancias surgidas por un accidente ocasionaron el desmembramiento de la Subcomisión de Automovilismo del Club.
Es así como comenzó a circular la versión de conformar una nueva entidad, con Fermín Cajén a la cabeza, dedicada al deporte motor. El sábado 22 de febrero de 1941 se realizó la primera asamblea, donde se sentaron las bases de la nueva entidad, Automóvil Moto Club Olavarría. En el estatuto ya hablaban de fomentar el turismo y apoyar a las entidades de bien público.
El Gran Autódromo Sudamericano de Olavarría se inauguró en 1998 y diez años después cambió su nombre por “Hermanos Emiliozzi”, en homenaje a Dante y Torcuato, los créditos locales que lograron los campeonatos de Turismo Carretera de las temporadas 62, 63, 64 y 65 con la recordada Galera.
También se decidió cambiar el trazado, lo que permitió mayor velocidad en todo el perímetro, formando una especie de semi-óvalo.
Se trata de un circuito muy rápido y con una larga recta, que casi llega a los 1.000 metros. El motor es muy importante, ya que detrás de boxes también hay una combinación de dos rectas donde los autos de TC llegan a los 250 km/h.
Los chasis deben ir bien apoyados en la primera parte de la pista porque posee muchas curvas. Y la tracción se debe destacar en la Horquilla “Luis Landriscina”, previa a la entrada a los boxes.
Es uno de los autódromos más seguros de la Argentina, ya que tiene extensas y alisadas banquinas. Al estar construido en una llanura, el circuito ofrece casi la visión total para los espectadores.